China

Tarde y mal

La Razón
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La consolidación de Gadafi supondría la mayor vergüenza de Occidente, principalmente de la UE. Al menos Reagan advirtió de que el beduino era un orate criminal e intentó asesinarle. Con la ominosa abstención de Alemania, el Consejo de Seguridad de la ONU ha permitido tarde y mal una zona de exclusión aérea en Libia. La abstención de Rusia y China, obviando su capacidad de veto, denota que el genocidio no es discutible.
En un teatro de operaciones con aviación hostil, la exclusión obliga a destruir sus aviones, depósitos e instalaciones de navegación y alerta temprana y, especialmente, las baterías de cohetes soviéticos SAM. La fuerza aérea libia es un supermercado de aparatos rusos, franceses, italianos, yugoeslavos, con técnicos y pilotos serbios, surafricanos, cubanos, rusos, norcoreanos y paquistaníes, a más de libios.
Más del 50% de la flota aérea libia está en depósito por obsolescencia de mantenimiento o canibalización, incluyendo la mitad de los MIG. Basta atacar Tripolitania, donde están las bases principales. Con excepción de Tobruk, el pueblo en armas puede sentirse seguro en Cirenaica, y concentrarse en la resistencia terrestre.
España sólo prestará bases de reaprovisionamiento para ingleses y americanos. Los aviadores aliados tienen sus planes de operaciones listos desde hace semanas. ¿A qué la tardanza? ¿Estaremos esperando a que la guerra civil acabe en tablas y Gadafi sólo tenga que cambiar de arenal la jaima, la camella y las 200 vírgenes? Si se retrasan los fuegos artificiales, habrá tongo.