«Los vecinos decían que la mala suerte se cebaba con nosotros»

MADRID- De nuevo, Lorca. Ayer volvió a sentirse en la localidad murciana un miedo que recordaba al de aquel 11 de mayo de 2011, cuando un terremoto de 5,1 grados dejó a su paso 9 fallecidos y más de 300 heridos. Afortunadamente, no hubo que lamentar daños personales, aunque sí materiales. El alcalde habló para LA RAZÓN.
–¿Cómo se han producido las evacuaciones?
–Hemos evacuado con carácter preventivo cuando se ha dado la mayor intensidad de la crecida, sobre todo en la zona de Santa Quiteria. Al final, el río no se desbordó, aunque a mediodía cayeron 2000 metros cúbicos por segundo. Ha sido un momento crítico. Finalmente, el Polideportivo de San Antonio ha acogido entre ocho y diez familias.
–¿Han cuantificado los daños materiales?
–Temíamos por los edificios que ya habían resultado dañados por el terremoto. Algunas de sus cornisas se han abierto. Ha habido muchísimos daños. Se han inundado los sótanos del Hospital Virgen del Alcázar y de la residencia de ancianos. En la huerta se han dado daños muy cuantiosos. En la Rambla de Nogalte hemos visto ganado, toros y cerdos nadando. Era como un mar. La gente estaba en las fachadas de sus casas y ha habido que rescatarlas con helicópteros.
–¿Cómo han reaccionado los vecinos?
–Ha sido un susto muy gordo y la gente está muy sensibilizada. Los comentarios eran: «Qué mala suerte tenemos, sólo nos pasa a nosotros...» Pero queremos solidarizarnos muchísimo con la localidad de Puerto Lumbreras.