«Lo que dice Rajoy es verdad Rubalcaba no es de fiar»

VALENCIA-La familia Del Moral- Lara no tiene demasiado interés en el debate. Son seis en la familia y todos están en paro, excepto Jonathan, de 26 años, que tiene un trabajo a media jornada.

No confían en la labor de los políticos, creen que no solucionan los problemas y les piden que se pongan de acuerdo para arreglar la situación actual. Cipriano del Moral aseguraba antes de comenzar el debate que la historia ha demostrado que los políticos hacen poco por el pueblo. Como creyente, considera que la solución vendrá dada por Dios: «Puedo dar mi confianza a un amigo, pero no a un político».

Rubalcaba reconoce que hay crisis: «¡No me digas! ¡Que hay crisis! Aquí pasamos el mes como podemos, nos pagan la hipoteca, nos la han reducido a la mitad, pero a partir de febrero volveremos a pagar casi 500 euros». Sus ingresos se reducen a los 1.000 euros del sueldo de Jonathan y de una prestación que recibe Cipriano, quien también hace «cuatro chapuzas». «Todos los meses estamos en números rojos. Vamos pagando nuestras deudas como podemos y esta gente no me va a solucionar el problema porque no me dan trabajo. Ellos no me van a pagar la luz».

Jonathan, el único miembro de la familia con empleo, es el que más interés muestra por la política. «Nunca me ha gustado el PSOE; no es que me guste mucho más el PP, pero si el PSOE hubiese querido hacer algo bueno lo hubiese hecho. Para estar como estamos prefiero que cambien. A veces cambiar es bueno».

María, de 15 años y estudiante de 4º de Secundaria, oyendo a Rubalcaba exclama: «Pone ejemplos absurdos. Va en plan burlesco». Continúa el debate; el enfrentamiento entre Mariano Rajoy y Alfredo Pérez Rubalcaba no les gusta demasiado. «Sólo saben criticar. Mira, ahora habla de ayudar a los chavales. ¡Claro, yo ahí no entro!», exclama.

Jonathan escucha atentamente. «Lo que dice Rajoy es verdad. Está yendo a por él. Rubalcaba no inspira confianza.

Zapatero no sabía ni cuánto valía un café. Diga lo que diga, nadie le va a creer». Sobre quién ganará las elecciones, lo tienen claro. «Ganará Rajoy», y aunque Cipriano insiste en que no apoya a ningún político, apunta, sin perder la sonrisa, que «si gana Rubalcaba sería un palo».