Rajoy y Aznar ignoran a Rubalcaba y piden elecciones

MADRID-Un año más Mariano Rajoy y José María Aznar escenificaron ayer ante los fotógrafos una charla en los jardines del hotel en el que se ha celebrado la octava edición de los cursos de verano de FAES, antes de proceder a la clausura de los mismos. La buena situación que atraviesa el PP ha quitado esta vez morbo al encuentro entre los dos dirigentes, una sensación previa que confirmaron sus discursos. La tensión que pudo haber en el pasado ha menguado con el viento a favor de las encuestas y ayer los dos abogaron por una profunda agenda reformista como solución para la crisis, en un intercambio de mensajes en el que Aznar rebajó explícitamente su perfil para no quitar protagonismo al invitado.

El líder popular aprovechó el cierre del debate ideológico veraniego de su fundación para comprometerse con una agenda reformista con seis pilares y en la que, ante todo, colocó el acento en la promesa de que como presidente del Gobierno «no dejará a nadie en la cuneta». «No recortaremos el Estado de Bienestar, sino que lo reformaremos para hacerlo sostenible», defendió.

Proyecto de Nación
 El debate preelectoral, y posiblemente electoral será, si el PP gobierna, sí será capaz de gestionar la malísima situación económica y política que herede sin hacer nuevos recortes sociales, como promete. Ayer Rajoy insistió en que sus ajustes no irán por esa vía, sino en la dirección de convocar a los españoles a un gran proyecto nacional basado en incentivar a los emprendedores y en limitar los recortes a la grasa de la Administración Pública.

Sus seis mandamientos, cuidadosamente presentados en positivo, son: más trabajo para aumentar la competitividad; reforma y modernización del sector público; fortalecimiento institu-cional y regeneración política; mejora de la proyección exterior; sostenibilidad de la protección social; y reforma educativa. «Ahora lo que nos toca es mantenernos pegados a la piel de la sociedad española», fue la guía de actuación que marcó de cara a la campaña electoral, en un discurso en el que dejó a un lado al Alfredo Pérez Rubalcaba candidato.

Por su parte, Aznar avaló la necesidad de esa agenda reformista, e insistió, como ya ha hecho en ocasiones anteriores, en la conveniencia de que su partido explique con claridad a los españoles lo que habrá que hacer en los próximos años y el alcance de las reformas estructurales que hay por delante. «Sólo a partir de una reflexión común, razonable e informada es posible articular las reformas necesarias; reformas que deben ser explicadas y comprendidas para que susciten el apoyo de la sociedad española», sentenció.
También alertó de la crisis del Estado autonómico: «No es ni sensato ni sostenible mirarlo todo a través del prisma identitario de los nacionalismos; como tampoco es sensato creer que la descentralización del gasto público signifique su multiplicación».

El ex presidente del Gobierno aprovechó para escenificar su compromiso con la victoria de Rajoy en las generales. Dijo que está convencido de que sabrá liderar la recuperación de España; y también aseguró que FAES trabaja para ayudarle a conseguir esa victoria porque cree que su éxito es también el éxito de España. «Los juegos de "truco"o "trato"(del PSOE) han terminado y dejan como herencia un profundo deterioro de nuestro Estado autonómico que compromete a nuestro Estado de Bienestar y un daño inaceptable en nuestro Estado de Derecho», concluyó Aznar.

Tanto el ex presidente como el líder de los populares aludieron ayer en sus discursos a Bildu. Para Aznar, es la «peor herencia y la peor hipoteca» que deja el socialismo para el futuro de España. «Es nuestro mayor problema de fondo, y mira que han dejado problemas de fondo», sentenció. Rajoy advirtió de que «nadie puede estar al mismo tiempo dentro de las instituciones y fuera de la Ley». Sin apartarse de su estudiado discurso contenido, el líder popular aseguró que el PP permanecerá vigilante, «y el Gobierno también debe hacerlo, y evaluar las evidencias que Bildu deja todos los días sobre el flaco respeto que profesa a la ley y a las instituciones democráticas». «No se puede permitir que mientras se franquea la puerta de las instituciones, la dignidad de las mismas y el espíritu de la Ley salgan por las ventanas», concluyó.

Reformas
José María Aznar: «A partir de una reflexión común, es posible articular las reformas necesarias». «Necesitamos una agenda reformista»
«Es nuestro mayor problema de fondo, y mira que han dejado problemas de fondo»

«Es nuestra peor herencia y la peor hipoteca»

 

: «No recortaremos el Estado de Bienestar, sino que lo reformaremos». «Un gran proyecto basado en incentivar a los emprendedores»

Bildu
José María Aznar: «Es nuestro mayor problema de fondo, y mira que han dejado problemas de fondo». «Es nuestra peor herencia y la peor hipoteca»
Mariano Rajoy: «Nadie puede estar dentro de las instituciones y fuera de la ley». «El Gobierno debe evaluar las evidencias que Bildu deja todos los días»

Gobierno
José María Aznar: «Necesitamos un fortalecimiento institucional». «Hay que limitar los recortes a la grasa de la Administración Pública»
Mariano Rajoy: «Los juegos de "truco"o "trato"(del PSOE) han terminado». «Dejan de herencia un profundo deterioro de nuestro Estado»