Millo la cara humana del político

Barcelona- ¿Por qué recibir el riñón de un familiar de sangre si el suyo era compatible? ¿Por qué no hacerlo por la persona con las que has fundado una familia? ¿Importan los costes profesionales si se garantiza suficiente calidad de vida? Enric Millo, portavoz del PP en el Parlamento de Cataluña y pieza angular en el engranaje del partido, se recupera en el hospital barcelonés de Vall d'Hebron junto a su esposa, Montserrat Viñas, de la larga intervención a la que ambos se han sometido para que él le donara su riñón izquierdo.

Ambos evolucionan favorablemente, según informó la formación ayer, un día después de las dos intervenciones que culminan un largo camino en el que Millo no ha dudado ni un segundo sobre cuál era su papel en la enfermedad de su esposa.

Montse, así llama el portavoz del PP catalán a su mujer, padece desde hace años glomerulonefritis, una enfermedad renal crónica que va degenerando el funcionamiento de los riñones. Ya le funcionaban al 15 por ciento, por lo que era necesario someterse a la operación puesto que a partir del 17 por ciento tenía que someterse a un trasplante. Lo sabían. Desde hace tiempo.

Compatible
Los médicos de la unidad nefrológica del Hospital Vall d'Hebron habían explicado a Viñas que iba a necesitar el trasplante. Comenzaron hace meses las pruebas rutinarias para recibir un riñón de un donante vivo con familiares y también con su marido, con el que lleva más de dos décadas casada y comparte tres hijos. Las pruebas médicas revelaron que Millo era compatible, y tuvo claro desde el principio qué iba a hacer.

En la última campaña a las elecciones generales explicó a los periodistas que, si la lograba, renunciaría a su acta de diputado por Girona en el Congreso de los Diputados –fue cabeza de lista para afianzar la representación en una provincia dura para los populares- porque le iba a donar un riñón a su esposa. «No me lo pensé ni un minuto cuando el doctor me confirmó que éramos compatibles», explicó entonces.

Logró el escaño, renunció al Congreso y siguió moviendo los hilos del PP catalán para Alicia Sánchez-Camacho, que le tiene como pieza fundamental del partido como portavoz y en cada una de las negociaciones con CiU.

El martes ingresó en el citado hospital para comenzar junto a su esposa las pruebas previas al trasplante y finalmente ambos fueron sometidos a sendas intervenciones el jueves casi en el mismo tiempo por un equipo liderado por los doctores Enric Trilla y Joan Morote, cirujanos especialistas en trasplante de órganos.

A Millo, de 51 años, de edad le practicaron en una operación que se prolongó durante cuatro horas y media una laparoscopia, técnica no invasiva con la que separan los órganos de la pared intestinal para extraerle el riñón izquierdo con el mínimo de cortes posible. Casi al mismo tiempo, su esposa, que ha cumplido 52 aunque ambos nacieron en 1960, se sometía a otra intervención que culminó con la implantación del riñón.

La previsión es que el portavoz parlamentario del PP se recupere en el hospital durante la próxima semana y después de seguir tratamiento en casa, con lo se podría reincorporar a la política activa a finales de septiembre. Por su parte, su mujer, maestra de profesión, deberá permanecer ingresada alrededor de mes y medio.