Filosofía

Sin bando ni enemigo por Paloma Pedrero

La Razón
La RazónLa Razón

La situación social está que arde. Hay una mezcla de dura realidad y rabia inflamada, esa que nos sale cuando pensamos que la culpa de todos nuestros males la tienen los otros. Parecemos perros heridos a punto de morder. Y esto no tiene ningún sentido. Lo sabemos, la violencia genera violencia en todos y cada uno de nosotros, ya sea en el policía joven con escudo y arma al que dan alas para atacar, ya sea en el ciudadano en paro con hambre y angustia. Hay que parar un momento y hacer autocrítica. Estamos entre tanta batallita, tanto bando, tanta bandera, tanta ideología caduca,… perdiendo la posibilidad de ir al fondo de la cuestión. ¿Qué podemos hacer cada uno de nosotros realmente para salir de esta situación? No es verdad que seamos simples víctimas impotentes de unos políticos corruptos. ¿Qué haríamos nosotros si pudiéramos corrompernos? En este país la honradez es sólo un valor de boquilla, y al honrado se le tilda de tonto, como al bueno. Estamos encerrados en un mal diseño social, político y personal que no nos permite salir de la noria. Es muy fácil tirar balones fuera, decir que todos los demás son un desastre, mientras escondemos nuestro desastre personal debajo de la alfombra. Y no todo está peor. Recuerdo que éste fue un país de colores grises y sin ninguna posibilidad de expresión, recuerdo que Europa estaba llena de empecinadas fronteras. Las fronteras mentales son la peores, y eso sí que está en nuestras manos cambiarlo. Igual que nos levantamos para atender al hijo por la noche, levantémonos pensando que podemos hacer algo para mejorar las cosas. Empezando por nosotros mismos. Aprendiendo a tener pensamiento propio. Sin bando ni enemigo.