Berzosa protege a los vándalos

El rector de la UCM afirmó ayer en una entrevista concedida a la Cadena Ser y recogida por Europa Press que las detenciones de los cuatro miembros de la asociación Contrapoder tras su irrupción en la capilla de Somosaguas el pasado día 10 de marzo fueron «desmesuradas» y que «no hacían falta». Berzosa criticó además a la delegada del Gobierno en Madrid, Amparo Valcarce, al indicar que no pudo ponerse en contacto con ella tras el arresto de los cuatro estudiantes porque ésta se encontraba en un acto en Aranjuez. «Los pusieron en libertad y luego no me llamó», aseguró Berzosa.

Valcarce, por su parte, contestó a las declaraciones de Berzosa aclarando que «la Policía está obligada a investigar todas las denuncias y, por lo tanto, también éstas», según afirmó un portavoz de la Delegación del Gobierno a este periódico. Además, Berzosa confesó sentirse «acosado» por todo lo que está ocurriendo: «He recibido presión de correos con insultos porque decían que soy incapaz de denunciarlo, que si soy débil o condescendiente con estos grupos». Sin embargo, al calificar públicamente de «desmesuradas» las detenciones por dos delitos (contra la libertad de conciencia y contra los sentimientos religiosos) y de «muy pacífica» la cacerolada protagonizada ayer por estudiantes en apoyo a los detenidos, Berzosa dio, de forma velada, la razón al alumnado y parte del profesorado que estos días denuncian la impunidad con la que los grupos radicales como Contrapoder han actuado siempre en la universidad, al contar con el beneplácito de profesores y del propio rector. Y es que Berzosa se ha caracterizado a lo largo de sus dos legislaturas por su posicionamiento político al no condenar los abucheos a ciertos políticos en sus visitas a la universidad y promover otro tipo de actos, como el de apoyo al juez Garzón.