Más de 180 «sin techo» duermen cada noche en los albergues municipales

Sevilla- La crisis económica ha disparado los casos de personas que se ven abocadas a vivir en la calle. Sin trabajo, vivienda, ni apoyo familiar para subsistir, cada vez más personas acuden a los centros públicos y organizaciones asistenciales para comer y dormir. Por ello, junto al colectivo habitual de «sin techo» que varía dependiendo de la época del año, cobra fuerza un grupo amplio de personas que antes tenían una situación social normalizada y que han caído en la indigencia. El dato es revelador: más de 180 personas sin hogar pernoctan diariamente en los albergues de titularidad municipal. Una cifra que ha crecido exponencialmente conforme la crisis se ha ido recrudeciendo. De hecho, estos centros están cada noche al 95 por ciento de su capacidad, lo que da muestra de la situación extrema que vive el colectivo.

El Ayuntamiento dispone de dos centros de acogida para los «sin techo». El de más capacidad es el albergue de la calle Perafán de Rivera, recientemente reformado. Ofrece 165 plazas diarias para casos de emergencias sociales, de corta estancia, módulos familiares y de inserción. Al año son 60.225 plazas, disponibles las 24 horas del día. En este centro se cubren las necesidades más básicas, como la alimentación y el aseo. También se ofrece una intervención para la normalización de estas personas y su inclusión social. La atención se completa con un Centro de Día, un espacio socio-recreativo destinado al encuentro entre personas en la misma situación y los profesionales que ofrecen ayuda especializada.

El otro espacio es el centro de baja exigencia ubicado en el Paseo Juan Carlos I. Se trata de un dispositivo que tiene una gran flexibilidad de funcionamiento, con normas adaptadas a la atención de personas sin hogar crónicas. De hecho, no es necesario que la persona que llegue se identifique. Dispone de 20 plazas, lo que supone al año 7.300 pernoctaciones. Tan sólo presta servicio por la noche, con manutención y aseo.
El seguimiento de los casos se hace a través del Centro de Orientación e Intervención Social, ubicado en el albergue de la calle Perafán de Rivera o en la unidad móvil.
Este servicio «informa, orienta, valora e interviene para conseguir la normalización de la persona», aseguran fuentes municipales. En los casos más graves se pone en marcha el Servicio de Emergencias Sociales, que «da una cobertura inmediata a personas desprotegidas». El perfil de los atendidos es muy amplio: personas sin hogar, menores en situación de abandono, personas en situación de desalojo por vía de urgencia, mujeres víctimas de violencia de género o que ejercen la prostitución, personas en situación de vulnerabilidad por las olas de calor o frío, afectados por situaciones de desastres, personas que viven en asentamientos y ancianos que han tenido accidentes en sus domicilios.

La Delegación de Familia, Asuntos Sociales y Zonas de Especial Actuación colabora con otros centros de titularidad privada que también atienden a las personas sin hogar. Tal es el caso del centro de acogida Miguel de Mañara, gestionado por la asociación Familia Vicenciana. Dispone de 41 plazas y otras nueve en pisos tutelados. También se ofrece apoyo a los comedores de las Hijas de la Caridad del Pumarejo y Triana; el de la calle Misericordia que gestiona la Orden de San Juan de Dios; el de San Juan de Acre, dependiente de la Orden de Malta y el de Bellavista, gestionado por la hermandad del Dulce Nombre.

En diciembre y enero se alcanzó el lleno por la ola de frío
Durante los meses de diciembre y enero, coincidiendo con la época de más frío, la demanda de los albergues creció hasta el punto de que se rozó el 100% de ocupación. El Ayuntamiento ofreció 2.480 plazas al mes en sus distintos recursos. Coincidiendo con las olas de frío, el Servicio de Emergencias Sociales aumenta la frecuencia de las rutas que se hacen en los lugares donde pernoctan los «sin techo». Se les ofrece una plaza en un albergue y, si se niegan, se les dan mantas y bebidas calientes. En previsión, se acondicionan 40 plazas más para pernoctar en el Centro de Acogida Municipal y otras 20 en el centro Miguel de Mañara. También se difunde un folleto con los dispositivos disponibles y recomendaciones para mitigar el frío. Durante la primera quincena de febrero también se activó esta campaña especial.