10 años rana

Alguien debería decirle de una vez a Zapatero que la sinvergonzonería política que gasta es un abuso para la gente que madruga cada mañana para abonar sus falsas promesas. Pero como vivimos en un país de alucinados, donde las ranas parecen príncipes y los sapos son sinceros aliados nacionalistas que no quieren otra cosa que el bien de España, así nos va la feria. He observado que el PSOE –quien lo ha visto y quien lo ve- le daba un homenaje a Zapatero tras sus primeros diez años de desmanes en el Gobierno. Y la imagen que me viene a los ojos es la de un perro restregándose sobre los restos de un animal muerto. Los pesebreros jaleando a un inútil total sobre una escenografía que casi se apropia del éxito de la Selección Española en el Mundial. Y encima, el caradura profesional que nos gobierna es capaz de decir que no estamos tan mal. ¿Por qué no se lo dice, Señor Presidente, a los cinco millones de españoles que se han ido a la mierda del paro?. ¿Por qué no lo comenta con los cientos de familias de víctimas que todavía esperan a que sus asesinos les pidan perdón?.¿Por qué no se lo dice a los españoles que en Cataluña no pueden mandar a estudiar a sus hijos en Castellano?. ¿Por qué no nos explica el palo que nos espera cuando regresemos de vacaciones?.Definitivamente, Rodríguez Zapatero, usted nos ha salido rana, por mucho que sus pretorianos aparenten otra cosa. Como príncipe azul, hace tiempo que destiñe y deja entrever el color gris de su mandato. Hágale un favor a su patria, no escuche a tanto estómago agradecido y quítese de en medio de una vez, que en su partido hay gente con mucho más sentido común. Diez años rana. Sólo nos faltaba que nos besara. Que haya alivio, amigos.