ZP balance de éxitos

Año VI, balance de éxitos: pese a su tenacidad, los días siguen empezando de amanecida y acabando con la llegada de la noche; hay aire para todos, aunque, como en «Milagro en Milán», la muchedumbre, en la que degenera la ciudadanía, esté presdisponiéndose a llegar a las manos por un rayo de sol; en mayo, de vuelta a casa, una ráfaga de viento te puede refrescar la cara y alegrarte unos segundos; los grillos continúan cantando cuando tienen el agua al cuello; al menos, los jilgueros, los canarios y las palomas no se han visto afectados en su natural proceso de apareamiento; las gatas maúllan en los callejones, aún hay vecinos, incluso vecinos que se desvelan, y un gato macho que acude al reclamo; no es seguro, pero algún español puede enamorarse y renovar los pecados briosos de juventud y echarse una amante, ahora que es tiempo de liberación de endorfinas; una copa de anís todavía no ha alcanzado los dos euros de media; para llevarse una barra de pan no hay que pedir una hipoteca; la población mantiene el riego sanguíneo y las necesidades fisiológicas; Rajoy sigue siendo el líder; la oposición no disimula menos que quiera ser el Gobierno; continúa vigente Belmonte: «Incluso en los malos días anochece»; no hemos regresado al telégrafo óptico, hay líneas telefónicas, Obama se sabe el número de Moncloa y acepta el pluriempleo: presidente de Estados Unidos y terapeuta de José Luis.