El PSOE lleva a Sevilla su congreso federal

MADRID- Debacle en las elecciones autonómicas y municipales de mayo y hecatombe en las generales. La próxima cita electoral a la que se enfrentará el PSOE son las autonómicas andaluzas del próximo marzo que, por primera vez no coincidirán con una consulta nacional. El resultado del domingo pasado no augura nada bueno para el socialismo en su histórico feudo, donde ya se han producido los primeros síntomas del vuelco en favor del PP que los sondeos pronostican para esta Comunidad que no ha conocido desde su Autonomía más gobierno que el socialista.

Aún así el PSOE quiere echar el resto en Andalucía, volcarse en sostener el hasta ahora ha sido su principal granero de votos. Y de ahí que el 30 Congreso Federal que convocará el Comité Federal del próximo sábado se vaya a celebrar, casi con seguridad, los días 10, 11 y 12 de febrero en Sevilla, según aseguraron ayer fuentes de la dirección federal a este diario.

La decisión tiene un doble valor para el partido: de una lado el apoyo de toda la organización al andaluz José Antonio Griñán ante una cita electoral más que complicada. De otro, la respuesta del Comité Electoral al barón andaluz por el apoyo brindado a Alfredo Pérez Rubalcaba en la campaña de las generales, en la que llegó a ofrecerle su colaboración para después del 20-N.

En la madrileña sede de Ferraz no descartan además que el presidente andaluz intente retrasar las elecciones autonómicas todo lo que le permita el calendario, y estos es finales de abril. Todo retraso, afirman, juega en su favor «pues Mariano Rajoy ya habrá tenido que tomar decisiones difíciles y los andaluces podrán calibrar qué es lo que está en juego en sus elecciones». Por este mismo motivo, Griñán se negó a adelantar los comicios regionales para hacerlos coincidir con las generales, como ha sido habitual en los últimos años. De un lado, arguyó que el desgaste del Gobierno de Zapatero daría al traste con las ínfimas posibilidades que ya tenía el PSOE en Andalucía. De otro, consideró que la acción del nuevo gobierno del PP beneficaría su opción política y perjudicaría los intereses electorales del popular Javier Arenas.

Y a la espera de que los andaluces emitan su veredicto, la secretaria de Organización de la federación andaluza, se postulaba ayer en favor de la unidad del PSOE de cara al Congreso Federal, sin desvelar cuál era su apuesta ante una eventual candidatura de Alfredo Pérez Rubalcaba para la carrera sucesoria. En declaraciones a Ep, Díaz sí defendió en todo caso la necesidad de que todos los socialistas reconzcan el trabajo realizado durante la campaña electoral «por todo el Comité Electoral, y en especial por el candidato Alfredo Pérez Rubalcaba, que ha hecho en Andalucía una campaña intensa». Tanto que es la primera vez que un candidato del PSOE visita todas las provinciales andaluzas en una campaña.

«Nosotros le agradecemos cómo se ha dejado la piel, con mítines en ruta en municipios como Guadix o Lebrija. Ha hecho un trabajo encomiable aunque el resultado ha sido adverso para el PSOE», reiteró sin dar la más mínima muestra de cuál será la posición de su federación en el Congreso Federal. Unidad, unidad, fue la consigna, y eso que la cita de Andalucía llega partida en cinco pedazos.