Estados Unidos
El decálogo del cambio
Mariano Rajoy detalla en sus memorias la columna vertebral de las políticas que aplicará si llega a la presidencia del Gobierno. Las propuestas de futuro con las que sazona sus recuerdos y suvisión de la política se pueden englobar en diez grandes capítulos
Empleo y recuperación económica
Rajoy defiende una reforma laboral asentada sobre nuevas formas de contratación indefinida –que eliminen la dualidad en el mercado de trabajo–, así como en una amplia descentralización de la negociación colectiva, que sitúe en el ámbito de cada empresa las decisiones más importantes sobre las condiciones de trabajo. Aboga por contratos más flexibles, siguiendo el modelo de otros países europeos como Alemania; por luchar contra el absentismo; y por explorar nuevas fórmulas de conciliación laboral y familiar, desde mejorar el servicio de guarderías hasta facilitar zonas para niños en los locales públicos. Además de incentivar el teletrabajo o una mayor flexibilización de horarios. En materia económica, también defiende una revisión del marco fiscal y tributario que ayude a asignar de forma más eficiente los recursos, a distribuir equitativamente la renta y la riqueza y a cooperar en el desarrollo sostenible de la economía. A su juicio, al tiempo debe abordarse la revisión de la financiación de las comunidades autónomas y ayuntamientos, para lograr la suficiencia de recursos y corregir su dependencia de ingresos extraordinarios ligados al boom del ciclo inmobiliario.
Familia
Defiende una mayor protección a la maternidad y a las familias numerosas, promoviendo redes de apoyo a la maternidad. En ese sentido, considera que el aborto es un fracaso y que, por tanto, son necesarias reformas legislativas en ese terreno, así como más atención política y social a las jóvenes que se quedan embarazadas.
Reforma del sector público
Mediante una reducción del aparato administrativo de las comunidades autónomas; congelación del número de empleados públicos; garantía de la igualdad de oportunidades en el acceso a la función pública en todo el territorio español; simplificación normativa y burocrática; e incremento de la cooperación entre las comunidades, ayuntamientos y todo el Estado.
Otras reformas estructurales
Entre otras, la energética, reequilibrando la combinación de las diferentes fuentes de energías; con un cambio del modelo de producción de energía para reducir las emisiones de CO2 a la atmósfera; o con una revisión del sistema eléctrico para acabar con los déficits impagables.
Reforma educativa
Con especial atención a la educación secundaria y a la universitaria. Dos objetivos: recuperar la autoexigencia y la apuesta por el conocimiento; y aumentar la capacidad real para elegir el centro y la modalidad de educación que deseen los padres para sus hijos, reconociendo el derecho de cada centro a diseñar su propia oferta educativa, con menos trabas burocráticas, menor centralización y más autonomía. En relación con el profesorado, Rajoy defiende revalorizar su función social mediante planes de carrera mejor definidos. También impulsará una revalorización de la formación profesional, conectándola con las empresas. Su reforma universitaria irá dirigida a mejorar la apertura al exterior, la internacionacionalización y la agilidad para poder contratar a los mejores profesores.
Modelo autonómico
Rajoy defiende una revisión del actual modelo, aplicando primero un plan de saneamiento, y, en segundo lugar, reordenando los servicios públicos en base a criterios de mayor eficacia. No promoverá un nuevo proceso de traspaso de competencias a las comunidades autónomas. Sobre el debate abierto en relación al futuro de las diputaciones provinciales, su política irá dirigida a adaptar sus funciones, sin ampliarlas, pero manteniendo su función de apoyo a los pequeños municipios.
Acuerdos nacionales y con los nacionalistas
En su programa de Gobierno intentará recuperar los acuerdos de Estado con el PSOE en política exterior y europea, justicia, inmigración y educación. También se compromete a que sus pactos con los nacionalistas sean públicos y fruto de un compromiso también público, cuyo cumplimiento sea estrictamente supervisado a lo largo de la legislatura.
Regeneración democrática
En materia de Justicia, se compromete a buscar fórmulas para combatir la intensa politización del sistema de elección del Consejo General del Poder Judicial y de los magistrados del Tribunal Constitucional; así como a trabajar para fortalecer el principio de división de poderes, despolitizar la Justicia y reforzar la autonomía e independencia del CGPJ. Ofrecerá un nuevo pacto con la ciudadanía y un «compromiso auténtico» con la regeneración democrática, que implique más transparencia, una más estricta rendición de cuentas, mejor funcionamiento de los mecanismos de control, incluyendo el Tribunal de Cuentas, y mayor independencia de los organismos reguladores. Ese compromiso con la revitalización de la cultura democrática incluirá que se respete el resultado electoral en los municipios, de manera que el alcalde sea el candidato más votado; una mayor aproximación del elegido al elector, utilizando internet y las redes sociales; y también una mayor participación ciudadana en la elaboración de las leyes, a través de la audiencia de los sectores afectados, la publicación de los libros blancos y el favorecimiento del debate público.
Política exterior
Cuatro prioridades: Europa, Estados Unidos, América Latina y Mediterráneo. Promoverá un plan para fomentar la presencia de empresas españoles en China y Asia, teniendo en cuenta que una gran vía de fortalecimiento de las relaciones son los intercambios culturales, e intensificará la diplomacia económica.
Inmigración
Gestión ordenada de los flujos migratorios, de manera que los inmigrantes asuman en un periodo de varios años una «ciudadanía cívica», es decir, un conjunto de derechos y obligaciones básicos. Entre esas obligaciones señala el conocimiento de la lengua, el acatamiento de las leyes y de unos valores propios.
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