«Cada gramo de alcohol aporta calorías vacías»

-Se habla mucho de las bondades del alcohol, pero ¿cuáles son sus perjuicios para la salud?
-Según los conocimientos actuales hay más perjuicios que beneficios del alcohol, aunque es como todo: la moderación es buena. Lo malo es que el alcohol crea adicción y puede llegar a un consumo excesivo. Entre sus perjuicios, el más importante es el daño hepático, que es donde se metaboliza. Ese exceso, a largo plazo, puede derivar en una cirrosis hepática.
-¿El alcohol engorda?
-El alcohol favorece la obesidad. Yo no entiendo por qué en algunos foros está en debate que alcohol es útil para los regímenes de adelgamiento, porque aporta siete calorías por gramo que bebemos. Cuando damos consejos alimentarios según las necesidades, el ejercicio y el tipo de vida, reducimos las grasas porque aportan nueve calorías por gramo. Pero, cada gramo de alcohol aporta calorías vacías.
-¿Su consumo supone un riesgo para las personas que sobrepasan el perímetro abdominal?
-Sí . Sobre todo produce un aumento de la grasa intraabdominal, que es la más peligrosa para desarrollar el síndrome metabólico, una serie de alteraciones que producen aumento de la glucosa en sangre, glucemia del colesterol de los triglicéridos, tensión arterial, ácido úrico… Esta intolerancia a la glucosa conduce a que haya unos niveles de insulina muy altos y una diabetes tipo II con exceso de insulina. Eso, a su vez, es un círculo vicioso que produce más obesidad, más acúmulo de grasa en el abdomen y que tiene unas complicaciones cardiovasculares que, a la larga, nos pueden acortar la esperanza de vida.
-¿Qué tipo de complicaciones cardiovasculares?
-Un gran bebedor puede tener un ictus antes que otras personas de su edad. Además, se pueden producir alteraciones de los músculos del corazón. Todo esto hablando del exceso, no del consumo moderado. El problema es que socialmente hay personas que aunque sólo sea los fines de semana, consumen una excesiva cantidad de alcohol.
-¿Es peor beber a diario o un poco más los fines de semana?
-Depende de la cantidad. Si a diario se toma una copita de vino con la comida o con la cena, puede ser hasta saludable. Si el consumo diario sobrepasa esa recomendación ya es otra cosa. Lo malo de los fines de semana es que suelen ser bebidas alcohólicas más concentradas. Hay que distinguir entre los grados de la bebida. Por ejemplo la cerveza ronda los seis grados y el vino doce, pero bebidas fuertes como el whisky o el vodka poseen cuarenta o cincuenta grados. Así que no es lo mismo beber whisky que cerveza.