Phil Jackson cierra el joyero

Phil Jackson ha asegurado que cuando acabe esta temporada también lo hará su carrera como entrenador. No es la primera vez que anuncia su adiós, para después seguir ganando títulos de la NBA, aunque la rotundidad de su «no» ante la posibilidad de una vuelta atrás permite intuir que ahora sí va en serio.

Tiene decidido que en junio echará la llave a su joyero personal, haya conseguido o no el anillo número 12 en los banquillos. El «maestro Zen» consiguió otros dos más como jugador, pero su papel vestido de corto no fue tan brillante como con la pizarra en la mano. Nadie ha ganado tanto como él en la NBA, ni siquiera el mítico Red Auerbach, que dirigió la primera etapa victoriosa de los Celtics de Boston.

Su triángulo ofensivo, nacido de la cabeza de Tex Winter, es ya historia de la mejor Liga del mundo, igual que su silla especial, un poco más alta que el resto y con más respaldo en la que ha pasado sus últimas temporadas en el banquillo. Dirigió a los Bulls de Jordan y Pippen (6 títulos), a los Lakers de Kobe y O'Neal (3) y ahora suma otros dos éxitos más con Bryant y Gasol, con los que ha jugado tres finales en dos años y medio.

Ha tenido la suerte de encontrarse con los mejores jugadores en el momento ideal, pero también es cierto que siempre ha conseguido mejorarlos y no sólo en los aspectos baloncestísticos. Le han interesado tanto los movimientos en la cancha como la motivación, para la que nunca dudó en utilizar conceptos de la filosofía Zen. A cada jugador le regalaba un libro como ejemplo de lo que quería de él en el equipo, y muy pocos han criticado sus métodos o su forma de ser en el vestuario.

«Creo que ya he cumplido, especialmente con esta organización», decía respecto a su adiós a la Liga y a los Lakers. «Es mi última temporada, creo que he entrenado tanto como deseaba», insistía Jackson, contundente al negar la posibilidad de que sólo se tome un tiempo de descanso para después volver.

Antes de irse quiere volver a ganar un campeonato al que los suyos son favoritos. «Este será mi último baile y espero que sea magnífico». ¿Se referirá a una final otra vez ante los Celtics o frente a los nuevos Miami Heat de LeBron, Wade y Bosh?