Mario Iceta: «La fe es compatible con el nacionalismo»

MADRID- El Papa acaba de ponerle al frente de la diócesis de Bilbao, un nombramiento que no ha estado exento de polémica por su posición lejana al nacionalismo. Pero Mario Iceta, que hasta la fecha era obispo auxiliar de la diócesis vizcaína, constituía la candidatura perfecta. Natural de Guernika, domina el euskera y posee una amplia formación tanto científica como teológica.

-¿Cuál fue el primer pensamiento que se le vino a la cabeza tras enterarse de la noticia?
-Fue una sensación de contraste entre la pequeñez y las limitaciones de uno, por un lado, y la desproporción de la misión que se me confía, por el otro. Pero a la vez sensación de confianza en el Señor, si Él me envía este servicio, Él me enviará los medios.

-Ya conoce la diócesis, ¿qué cosas cree que debe mejorar?, ¿qué puede aportar usted?
-En este momento está en marcha el cuarto plan de evangelización, aprobado por mi prececesor, Ricardo Blázquez, para diagnosticar las fortalezas y debilidades de nuestra diócesis. El objetivo fundamental es el de revitalizar nuestras comunidades a la luz de la Palabra de Dios y poder salir así a la misión. Acogeré este plan y lo impulsaré para llevarlo adelante.

-¿Se puede vivir públicamente la religión en el País Vasco?
-Sí se puede, la sociedad es respetuosa. Jamás he tenido ninguna dificultad al ir con el clériman por la calle, al contrario, te saludan. Aquí también hay una Semana Santa, se sacan los pasos a la calle. Hay tradición de vivir con naturalidad la expresión de la fe.

-¿Cómo ve a los jóvenes de Bilbao, qué medidas se deben tomar para acercarles a Dios y a la Iglesia?
-Nuestras comunidades están debilitadas, pero sobre todo hay una desconexión grande con los jóvenes. Es muy importante lo que dijo el Papa Benedicto XVI en su encíclica «Deus caritas est». No se comienza a ser cristiano por una decisión ética sino por el encuentro personal con Dios. Para que se produzca este encuentro es fundamental acercarse a la Palabra de Dios.

-Pero esto sólo se puede hacer con los jóvenes que van a la Iglesia, ¿y con los alejados?
-En Bilbao contamos con la ventaja de que el 50 por ciento de los estudiantes está matriculado en centros religiosos. Estos centros se esfuerzan mucho en propiciar este encuentro con Dios. Aunque nunca puede ser una imposición, pero sí una propuesta. También es fundamental la familia, por eso hay que aprovechar el tiempo en el que los padres eligen la formación de su hijo. En las parroquias estamos cuidando mucho las misas con las familias, que los padres sean los transmisores de la fe a sus hijos.

-De cara a la Jornada Mundial de la Juventud de Madrid, ¿qué se está haciendo para animar a los jóvenes vascos a asistir?
-En Vizcaya desde hace años se cuida la pastoral juvenil. Queremos vivir la JMJ de dos modos: como diócesis de acogida, ya que tenemos 3.000 plazas para acoger a jóvenes de otros países, y después con ellos iremos al encuentro. El primer fin de semana de octubre llega la Cruz de los Jóvenes a la diócesis, que será un estímulo para asistir al encuentro con el Papa en Madrid. Celebraremos vigilias de oración, encuentros con los enfermos, con los inmigrantes, etc.

-¿Qué opina de los desplantes contra obispos en Cataluña y el País Vasco?
-La tarea del obispo es la de fomentar la comunión en su diócesis, de tener capacidad de escucha, de diálogo, de buscar los puntos comunes, es una ocasión para que el obispo pueda trabajar. Yo quiero trabajar por la comunión en nuestra Iglesia.

-¿Y de la carta que firmaron en febrero sacerdotes y fieles para poder tomar parte del proceso de elección del nuevo obispo?
-En nuestra diócesis hay diversas sensibilidades y como fruto de ello, dentro de la comunión de la Iglesia hay gente que prefiere una mayor participación en el modo de elección de los obispos. Pidieron a la Nunciatura un procedimiento diferente. La respuesta del Nuncio fue que la Santa Sede eligiriría al obispo que mejor pudiera servir a la Iglesia.

-¿Es compatible ser nacionalista y ser un buen católico?
-Son ámbitos distintos. Uno es el de la fe, y otro el de la opción política. Bien sabemos que la fe es compatible con muchas opciones políticas.

-¿Incluído con el nacionalismo?
-Sí, también.

-¿Ha hablado con Munilla?
-Si, sólo para saludarnos. No es momento de tocar ningun tema.

PERFIL
El más joven de España
A sus 45 años, Mario Iceta es el obispo más jóven de España y cuenta con una gran capacidad de oratoria para acercarse a los jóvenes. Nació en Guernika (Vizcaya) y fue ordenado sacerdote en 1994 en la catedral de Córdoba. Doctorado por la Universidad de Navarra en Medicina y Cirugía con una tesis doctoral sobre Bioética y Ética Médica, cuenta también con un doctorado en Teología y un máster en Economía. Ha vivido durante varios años en Córdoba, donde ha tenido diversos cargos pastorales como el de párroco, vicario episcopal, canónigo penitenciario y profesor universitario. Es un gran experto en Bioética y fundó la Sociedad Andaluza de Investigación Bioética. En febrero de 2008, Benedicto XVI le nombró obispo auxiliar de Bilbao.