Cataluña

No desenfocar el tema por Josep Maria Rañé

La Razón
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Hoy asistiremos al debate en sede parlamentaria de la financiación de Catalunya y esperemos que no se desenfoque el tema. Dejando a un lado la reflexión sobre si estos momentos de zozobra económica es el momento más oportuno, pues de igual manera que siempre habrá personas y grupos que opinen que nunca es el momento, las habrá que sustentan lo contrario.

Si el debate sobre la financiación se ve envuelto en el debate sobre la independencia, como se obstinan a proclamar las fuerzas que tienen ese objetivo, se transformará en un diálogo de sordos que, como siempre, producirá «mucho ruido y pocas nueces». Presentar o pretender, o las dos cosas, que el sistema de financiación es un paso más hacia la independencia es un error de estrategia. Ese planteamiento conduce al enroque de la otra parte negociadora, retroalimentándose así los extremos y bloqueando las soluciones al problema real.

La búsqueda del acuerdo ha de orientarse a conseguir que los recursos procedentes de los impuestos propios cubran más y mejor los gastos que comportan las competencias asumidas. Que no sea necesario depender del Estado para pagar aquello que corresponde prestar. Es decir que el ejercicio del autogobierno suponga asumir más responsabilidad fiscal.

La fórmula que Catalunya quiere debe ser generalizable. Esa será la «prueba del nueve» de que no esconde dobleces sobre la voluntad de permanecer en España. Cuestión aparte es si el Gobierno y las otras comunidades optan por generalizarla, eso forma parte de su libertad y voluntad.