Rubalcaba augura ahora «una grave depresión»

MADRID- Rubalcaba se faja ya como líder de la oposición. Tan sólo ha necesitado 24 horas para responder a las primeras medidas anunciadas por el Gobierno para hacer frente a la crisis. Con el año a punto de agonizar, el socialista convocó el pasado sábado a su equipo económico para estudiar las iniciativas de Mariano Rajoy para reducir el déficit, que ayer mismo entraron en vigor tras su publicación en el BOE. El presidente del grupo parlamentario socialista pidió la comparecencia de Rajoy y vaticinó que el plan llevará a los españoles «a una grave depresión económica y a la destrucción de empleo».

Tras el anuncio del plan del Ejecutivo, que entre otras decisiones congeló el sueldo de los funcionarios, Alfredo Pérez Rubalcaba convocó una «reunión de urgencia» con su equipo económico para analizar unas medidas que ya calificó de «graves e injustas». Después de la reunión, el ex ministro del Interior dio una rueda de prensa en la que no dudó en asegurar que dicho plan de ajuste «nos va a llevar probablemente a la recesión económica, y desde luego a una grave depresión económica, y, por tanto, a la destrucción de empleo y a una falta de crecimiento de nuestra economía, que ya estamos teniendo y que se agudizará con el plan que el Gobierno ha presentado».

El presidente del Grupo Socialista subrayó además que las medidas de ajuste del Ejecutivo no contemplan incentivos al crecimiento, sino una subida de impuestos que deprimirán aún más el consumo y un modelo productivo de «salarios bajos y más trabajo», informa Ep.

Y es que el nuevo Gobierno de Rajoy pretende recaudar entre 6.100 y 6.200 millones de euros gracias a cambios fiscales que incluyen un alza temporal y progresiva del IRPF y del Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI). Rubalcaba se mostró partidario de ajustar y subir impuestos, pero se quejó de que el PP tome la senda equivocada al perjudicar especialmente, en su opinión, a las rentas medias y a los jóvenes.

El PSOE se hubiese decantado, explicó, por aumentar la fiscalidad a los grandes patrimonios y a las grandes corporaciones, reformando el impuesto de sociedades para implantar, por ejemplo, topes en las deducciones a las que puedan acogerse.

Los socialistas se reunirán de nuevo para estudiar las medidas de forma individual y explicarán sus análisis en comparecencias públicas, anunció Rubalcaba. De momento, no tiene reparos en calificar la subida del IBI de «ocurrencia con pretensiones social demócratas» porque perjudicará a los vecinos de municipios menos prósperos. En cuanto a los cambios en el IRPF, se quejó de que no son «razonables ni justos» porque el 70% del ajuste lo soportarán trabajadores que ganan menos de 53.000 euros al año.

LA LUPA
La economía de un ministro «olvidadizo»
Durante los años que Rubalcaba –que ahora augura grandes cataclismos económicos– fue ministro de Zapatero, los datos hablan por sí solos. El déficit se situaba en el 2% en 2006 y ha cerrado 2011 en un 8%. En cuanto a la tasa de paro, el 8,3% de desempleados de 2006 se disparó al 21,5%. Está claro que Rubalcaba sabe de lo que habla.
PIB
Con Rubalcaba en el Gobierno, el PIB pasó de crecer un 4% a caer un 3,7% en 2009 y otro 0,1% en 2010.