El príncipe recibe a militares heridos en Afganistán el Líbano y Bosnia

Don Felipe, vestido con el uniforme de capitán de fragata de la Armada, les ha saludado uno por uno, ha posado junto a ellos para los medios gráficos y se ha interesado por la recuperación de estos militares, nueve de los cuales han recibido ya el alta médica, mientras que los ocho restantes se encuentran aún convalecientes, todos por heridas recibidas en Afganistán.

Las secuelas han obligado a acudir con muletas a cuatro de los militares que formaban parte de esta delegación, la mayoría de ellos heridos en Afganistán por explosión de artefactos, accidentes en vehículos del Ejército y, en el caso de un cabo y un soldado, disparos de la insurgencia.

Un soldado herido en el Líbano y un teniente víctima de la explosión de una granada de mano en Bosnia, que ya ha recibido el alta médica, completaban el grupo de militares recibidos por el heredero de la Corona.

A la audiencia no ha podido acudir una cabo a la que los médicos tuvieron que amputar una pierna como consecuencia de las heridas recibidas en el cumplimiento de su misión en Afganistán y que permanece ingresada en el hospital militar madrileño Gómez Ulla.

En tres audiencias previas, Don Felipe ha recibido asimismo en el Palacio de El Pardo a una treintena de coroneles y capitanes de navío, a una comisión de la XXII promoción de la Academia General del Aire -al cumplirse 40 años desde su salida de este centro- y a tres de los galardonados con los Premios de los Cuerpos y Especialidades del Ejército de Tierra en su última edición.

El general de brigada Tomás Rivera y los generales de división Carlos Valverde y Guillermo Jenaro han recibido la felicitación del príncipe por su trayectoria en las especialidades militares de Artillería, Intendencia e Ingenieros Politécnicos, respectivamente.

Las audiencias militares forman parte de las actividades oficiales del príncipe desde hace un año y anteriormente eran un cometido que ejercía exclusivamente el rey.