Palestina en la Unesco: un obstáculo para la paz

PARÍS- En pleno rebrote de la violencia entre palestinos e israelíes y con un proceso de paz estancado desde hace un año, la integración de Palestina como miembro de pleno derecho de la Unesco podría complicar aún más la resolución de este enquistado conflicto. Ayer la petición palestina de adhesión a la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, obtuvo la aprobación de la mayoría de los países miembros tras una tensa votación. Eso la convierte en el socio número 195 de este organismo, del que hasta ahora formaba parte como «observador».

Entre los 107 países que votaron a favor se encontraba España, que como Francia se abstuvo hace unos días en el voto del comité ejecutivo, además de Rusia o China, así como numerosos Estados latinoamericanos. En contra, se pronunciaron catorce miembros, encabezados por Estados Unidos, que considera «prematura» la admisión de Palestina dentro de una organización de la ONU mientras no se ha resuelto la petición de reconocimiento como Estado presentada por las autoridades del país árabe el pasado 23 de septiembre. Israel, Alemania y Canadá, también rechazaron la solicitud, mientras que 52 países, como Reino Unido e Italia, se abstuvieron y otros doce no participaron en el proceso.

El hecho de que esta adhesión preceda al voto del Consejo de Seguridad de la ONU del próximo 11 de noviembre sobre el reconocimiento del Estado palestino ha alimentado las reservas de muchos países occidentales. Con esta pretendida victoria diplomática, que supone un paso simbólico pero muy importante en sus aspiraciones a convertirse en miembro de pleno de derecho de la ONU, las autoridades palestinas intentan presionar a Estados Unidos, que agitan la amenaza de oponer su veto en la próxima reunión del Consejo. Sin embargo, las consecuencias de la integración de Palestina en la Unesco son muchas. La organización suma un nuevo miembro, pero se va a ver amputada de una parte importante de su financiación. Como ya habían advertido, Estados Unidos confirmó ayer la retirada de su contribución económica, un 22% del presupuesto total, lo que dejará un agujero de 70 millones de dólares. Una decisión conforme a dos leyes de 1990 que prohíben financiar cualquier entidad de la ONU que acepte a los palestinos como Estado miembro sin haber alcanzado un acuerdo de paz con Israel, que también va a retirar su aportación financiera. Un recorte que va obligar a la Unesco a ajustar sus presupuestos y que podría perjudicar a los beneficiarios directos de algunas actividades esenciales, como los programas de desarrollo y ayuda a mujeres y niñas en algunos países. «Va a ser imposible que la Unesco pueda cumplir su misión», declaró resignado ayer el embajador de Israel ante la organización, Nimrod Barkan, que denunció «una maniobra palestina unilateral» que, a su entender, aleja aún más si cabe la posibilidad de acuerdo de paz. También advirtió a los países que, como Francia, apoyaron la adhesión, que su «influencia sobre Israel» disminuiría considerablemente.

Un revés para Nicolas Sarkozy, que desde hace meses pretende relanzar el estancado proceso de paz y acoger, hasta ahora sin éxito, un conferencia internacional en París. Tras declarar hace unos días que «la Unesco no era ni el momento ni el lugar», dando a entender la inoportunidad de integrar a Palestina como miembro antes de resolver la petición ante la ONU, Francia ha cambiado de postura. Este cambio de estatuto permitirá a los palestinos solicitar que algunos lugares simbólicos como Belén, Hebrón y Jericó integren la lista del Patrimonio Mundial de la Humanidad.

107 votos a favor
14 en contra y 52 abstenciones es el balance de la tensa votación de ayer en París. Palestina se convirtió en el Estado número 195, aumentado así la fractura internacional.

Varapalo económico
Con una aportación del 22%, Estados Unidos es el país que más contribuye a las arcas de la Unesco. Estaba previsto que este mes de noviembre dieran 60 millones de dólares. La portavoz del Departamento de Estado anunció ayer que ya no lo harán.