Va de fútbol por Julián García Candau

No recuerdo que con ocasión del clásico entre el Real Madrid y el Barcelona se haya especulado tanto con las alineaciones. No tengo en la memoria que desde que entrena al equipo madrileño el pintoresco Mourinho se haya hablado tanto de fútbol como ahora. Afortunadamente, parece que hemos dejado en los tinteros desde las viejas querellas, a los aspectos menos conflictivos. El Madrid-Barça, aunque lo disputan dos entidades que están más allá de lo estrictamente deportivo, dadas las características sociopolíticas que encarnan, se presenta, salvo injerencias turiferarias, como encuentro futbolístico y en ello estamos.

Este encuentro tiene la virtud de que «mouriñólogos» ni «guardiólogos» se han puesto de acuerdo para pergeñar lo más recomendable. Gusta que Pep alinee tres defensas al tiempo que se le advierte del peligro que tiene el Madrid al contragolpe. Gusta que jueguen en el centro Xavi, Iniesta, Busquets y Cesc para mandar y se duda sobre su eficacia si junto a ellos no hay tres auténticos atacantes, ya que también se sustenta la idea de que Cesc supla a Villa y Alexis sea titular.

En Madrid no se tienen las ideas claras sobre si van a jugar Higuaín y Benzema juntos o quién será titular. Parece que la idea de colocar músculo en el centro con Lass, Khedira y Xabi Alonso tiene grandes apoyos. No son pocos quienes sustentan la idea de que en el partido habrá tensión y gran contacto físico y, contra estilistas, duros fajadores. Parece claro que Pepe y Sergio Ramos sigan juntos. Y Özil, fijo.

Posdata. Madrid y Barça tienen la oportunidad de lucir extremos: Di María, Alexis, Pedro y Cuenca. Como antaño.