Dublín

La Audiencia archiva el «caso De Juana» al ignorar su paradero

Sin noticias del etarra De Juana desde hace más de diez meses, al juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco no le ha quedado más remedio que archivar provisionalmente la causa que mantiene abierta contra él por enaltecimiento del terrorismo.

De Juana Chaos se negó a declarar en la Audiencia Nacional en relación a una carta, leída en su homenaje, que supuestamente enaltecía a ETA
De Juana Chaos se negó a declarar en la Audiencia Nacional en relación a una carta, leída en su homenaje, que supuestamente enaltecía a ETAlarazon

Al tratarse de un procedimiento abreviado (la pena que lleva aparejada este delito no supera los dos años de cárcel), y habiéndose practicado ya todas las diligencias posibles, la ley impide continuar adelante con el proceso sin tomar declaración al imputado. Y José Ignacio de Juana Chaos, ex miembro del «comando Madrid» y actualmente en paradero desconocido, no parece que esté por la labor.

De Juana se refugió en Dublín (Irlanda) en agosto de 2008, tras ser excarcelado después de pasar 21 años en prisión (fue condenado a penas que suman más de 3.000 años de cárcel por 25 asesinatos). La amenaza de una querella a raíz de una carta leída supuestamente en su nombre, en el homenaje que le tributaron sus incondicionales en San Sebastián, le hizo poner pies en polvorosa. La misiva se refería al histórico dirigente etarra, ya fallecido, Domingo Iturbe Abasolo «Txomin» como «un gran hombre y por suerte amigo de este pueblo».

Orden de detención

El magistrado pretende interrogarle para averiguar si fue el autor de esa carta en la que aprecia indicios de la existencia de un delito de enaltecimiento del terrorismo. Pero hasta el momento, el titular del Juzgado de Instrucción número 6 de la Audiencia Nacional no ha podido practicar esa diligencia. Velasco dictó una orden internacional de detención contra De Juana en noviembre de 2008, ante la evidencia de que el etarra no iba a presentarse voluntariamente.

Finalmente, De Juana se presentó en un tribunal de Belfast (Irlanda del Norte), que le dejó en libertad bajo fianza de 5.000 libras esterlinas (casi 6.000 euros). Con De Juana en libertad vigilada, comenzó entonces un farragoso proceso judicial para que la Justicia británica se pronunciase sobre su extradición, que el etarra dilató todo lo que pudo con una batería de recursos y alegando, incluso, problemas médicos que retrasaron la lectura del esperado fallo.
Los meses pasaban y De Juana Chaos seguía en Irlanda sorteando a la Justicia española.

Finalmente, el 1 de marzo del pasado año el juez instructor, Thomas Burgess, rechazó todos los argumentos de la defensa del etarra y acordó su entrega a España. El terrorista recurrió pero, temiéndose lo peor, se dio a la fuga. El 29 de abril de 2010 se constató que no se sabía nada de De Juana desde su última comparecencia ante la Policía norirlandesa. El juez Velasco pidió entonces a Interpol Londres que averiguasen su paradero. Hasta hoy.

El archivo del procedimiento no es, sin embargo, definitivo. Si Interpol localizase a De Juana, el magistrado español reabriría el caso y el etarra debería ser entregado a España para tomarle declaración.