La «hoja de ruta» de ETA

Es inquietante comprobar que la banda ETA y su aparato político han regresado a la primera línea política cuando una se encontraba en una situación agónica y el otro ilegalizado. La exclusión de Batasuna y sus franquicias fue un enorme éxito que fue refrendado por las instituciones europeas. Los terroristas habían quedado fuera de juego y se caminaba con paso firme a su inexorable desaparición. Lo terrible es que ahora se sienten vencedores, controlan la diputación foral de Guipúzcoa, el Ayuntamiento de San Sebastián y numerosos municipios vascos y navarros. El siguiente paso se ha cumplido en esa tenebrosa «hoja de ruta» con el intento de internacionalizar el conflicto. Ahora se preparan para la batalla de las generales, donde quieren superar al PNV y hacerse con la hegemonía del espacio nacionalista. Esto sucede sin que ETA haya entregado las armas y sus asesinos asumido las responsabilidades penales. Lo lamentable es que esto se ha hecho gracias a la miopía de los dirigentes socialistas y la incompetencia del Gobierno.