Castilla y León

Naturaleza y aire puro que seducen al turista

El hotel rural «La Senda de los Caracoles» añade al confort de sus instalaciones, la apuesta por divulgar el noreste segoviano

Naturaleza y aire puro que seducen al turista
Naturaleza y aire puro que seducen al turistalarazon

Segovia- «La Senda de los Caracoles» se sitúa en Grado del Pico, una pedanía de la localidad segoviana de Ayllón. «Éste pueblo tiene más perros que personas», asegura, con ironía, Belén Gonzalo, la dueña de este hotel rural, situado en la zona que linda con Guadalajara y Soria. Lo que no le ha impedido emprender. «Abrimos el negocio en 2005, y la idea surgió porque nuestra familia procede de aquí. Mi padre tuvo que marcharse a Madrid para buscarse las habichuelas de bien pequeño, y a nosotros nos apasiona el medio rural, porque, lo crea o no la gente, no todo está en las ciudades», afirma. Pero no sólo de números y balances trata esta iniciativa empresarial: «buscábamos dar a conocer la belleza de este lugar, que tiene a un lado dos parques naturales, como el Hayedo de Tejera Negra y Las Hoces del Río Riaza». Allí hay ribera, monte bajo, pistas de esquí. Reclamos culturales, como el románico soriano o Tiermes, sin olvidar villas medievales, como Atienza, Pedraza, Sepúlveda o Ayllón.«La Senda de los Caracoles» es un hotel con spa y restaurante, en un entorno cerealista, en el que el ganado ovino sostiene a muchas familias. Se encuentra a 160 kilómetros de Madrid y a 115 de la capital del Alcázar. De allí llegan muchos huéspedes, que se sorprenden de la belleza que alberga esta zona, porque desconocen lo que van a encontrar. «Con la crisis se está agudizando el ingenio y las administraciones se están dando cuenta de que el turismo es una de las industrias que puede ir bien», asegura Belén quien considera que «el Acueducto ya stá muy vendido y se puede ofrecer mucho más de la provincia de Segovia». En este contexto, señala que se están dando pasos para la promoción en España, pero queda por dar el salto a otros países.

Mayor autoexigencia
Aunque Belén considera que no todo hay que enfocarlo a las administraciones. «La gente suele ser muy comodona y no gusta de ser dinámica, pero hay que tener una visión de mirar adelante. Es cierto que hay que educar a las instituciones, pero también al hostelero». Reconoce que la excelencia se encuentra buscando. «Como autónomo, sí o sí, has de trabajar las 24 horas del día. Cuando no estás con el cliente, piensas en la rentabilidad, en vender, en promocionarte, en actualizarte», explica, a la par que asegura que «no obstante, puedes querer que tu negocio sea Zara o una tienda de ropa del barrio, y ser igual de feliz o más».

Belén echa en falta apoyo de los políticos. «A la hora de invertir, no se acude a estas zonas, por una mera cuestión práctica. Donde estamos pocos, votamos menos que en otros lugares. Está claro».

Asimismo, afirma que «es duro, pero también gratificante trabajar aquí. Pero no lo cambiaría por nada. Aunque no funcionara mi negocio, me buscaría otra salida, pero prefiero el medio rural a una gran ciudad, sin duda».

De su experiencia en estos siete años, asegura que han logrado posicionar este espacio de relax y salud en el mapa, aunque la crisis no ha sido ajena al turismo rural. De hecho, sentencia, en los dos últimos años «hay menos alegría». Lo que ha llevado a su negocio a «acercarnos más a lo que la gente demanda en su ocio y tiempo libre, a ofrecer lo que les pueda servir de provecho, a movernos».


De cerca
Belén Gonzalo vivía en Madrid. Allí emigraron sus padres, como tantos castellanos y leoneses, con el reto de salir adelante. Lo consiguieron. Pero ella quería volver a sus orígenes. Dejar atrás «esa manera de vivir». Es fisioterapeuta y decidió escapar de la capital de España para abrir este hotelito rural, situado en una zona en la que las provincias de Segovia, Guadalaja y Soria se dan la mano. «Voy a Madrid y me entra un agobio que me muero», asegura Belén, quien anima al emprendedor a buscar alternativas: basta con abrir los ojos para ver que hay otras formas de vida. Su gran empeño, reconoce, promocionar una zona por descubrir para muchos, incluso los segovianos.