El abogado de Fujimori esgrime la salud del expresidente para poner en duda que pueda someterse a un nuevo juicio

La Corte Suprema de Chile ha ampliado este martes el permiso dado en 2007 para extraditar a Perú a Fujimori, que inicialmente fue juzgado por por matanzas cometidas durante su mandato (1990-2000) y aún tiene pendiente un juicio por la supuesta entrega de dinero a periódicos que le apoyaron en sus aspiraciones políticas.

Un antiguo asesor de Fujimori, Vladimiro Montesinos, reveló que el presidente envió a diarios que respaldaban su segunda reelección unos 122 millones de soles (36,6 millones de euros) procedentes de la Fuerza Aérea de Perú (FAP) y del Ejército al Servicio de Inteligencia Nacional (SIN). El dinero figuraba bajo la consideración de gastos reservados.

El abogado del expresidente, César Nakazaki, ha fijado como "primera hipotesis de defensa"ante este nuevo proceso la salud de Fujimori, según declaraciones recogidas por el periódico peruano 'El Comercio'. En este sentido, "se va a analizar es en qué medida el estado de salud le permite a él enfrentar un juicio", ya que "cuando una persona está enferma el juicio debe suspenderse".

Fujimori fue extraditado a Perú en 2007 tras permanecer en Chile alrededor de dos años y, desde entonces, se encuentra recluido en el Centro Penitenciario de Barbadillo, situado en Lima. En 2009, La Justicia peruana condenó al expresidente a 25 años de prisión por las matanzas de Barrios Altos y La Cantuta, en las que 25 personas fueron ejecutadas por efectivos del Ejército.

POSIBLE INDULTO
Las autoridades peruanas solicitaron en julio de 2011 la inclusión, dentro de la extradición, del delito de malversación de caudales públicos. Ahora, el 'sí' de la Corte Suprema chilena llega en pleno debate en Perú por el indulto humanitario solicitado por la familia de Fujimori, que ha exigido la excarcelación del antiguo mandatario por motivos de salud.

El fiscal anticorrupción de Perú, Julio Arbizu, ha advertido de que la solicitud del indulto "no tiene nada que ver"con el nuevo juicio que se ha puesto sobre la mesa, por lo que si finalmente abandona la prisión y es condenado de nuevo deberá volver a la cárcel. Fujimori se enfrenta a una nueva pena de hasta ocho años de prisión.