Barça: la puntería justa (1-0)

El Barcelona jugaba ayer contra el Zaragoza, obvio, y contra su sistema defensivo, pero también empezaba a hacerlo contra el Arsenal, con quien se enfrenta el martes en los octavos de final de la «Champions» y debe remontar el 2-1 de la ida. «Es inevitable pensar en el Arsenal», había dicho Tito Vilanova, que al final sí estuvo ayer con su jefe, Guardiola, en el banquillo. Para los técnicos era peligroso por las rotaciones, que las hubo, pero los no habituales volvieron a demostrar que sirven, que cuentan, que resuelven partidos: Keita estuvo magnífico ante el Mallorca, Adriano se lució ente el Valencia y ayer el malí volvió a brillar con un gol justo antes del descanso que daba al líder mucha tranquilidad, porque hasta ese momento lo estaba intentando e intentando, pero sin éxito o chocando contra el portero Doblas.

El peligro para los jugadores estaba en su cabeza, en la posibilidad de pensar en Europa demasiado y nada en el Zaragoza, pero el equipo aragonés no lo puso muy difícil, al menos en un sentido. Sí en el defensivo. Aguirre acumuló muchos hombres atrás y cerró los espacios cuanto pudo. No en el ofensivo, porque apenas contragolpeaba. No inquietó a Valdés en toda la primera parte salvo en una ocasión que sirvió para demostrar que Piqué está rápido y en forma. En la segunda sí se estiró algo más.

La lucha del Zaragoza era una tarea casi imposible. Estar tantos minutos encerrado contra rivales tan capacitados, sin cometer un error... El Barça, sin Iniesta, Villa, Busquets y Abidal de salida, los cuatro que descansaron, aceptó encantado el regalo de su oponente (el balón) y además lo buscó con ahínco cada vez que lo perdió, por lo que iba acumulando un ataque tras otro. Empezó a desplegar su juego, los pases, con calma, sin volverse loco y sin encontrar tampoco demasiados huecos. Las paredes en el borde del área fallaban en el último pase y los centros de Maxwelly Alves desde las bandas no encontraban un destinatario que los rematara. Una entrada por sorpresa de Messi fue lo más peligroso. Paró Doblas, lo mismo que los tiros lejanos de Xavi y Mascherano. El Barça estaba cómodo y confiado aunque el gol no llegara. Pensaba que marcaría de una forma u otro y lo que no salió por el camino colectivo sí lo hizo por el individual. Messi rompió el orden con una jugada en la que dejó atrás a tres rivales, N'Daw, Obradovic y Da Silva, y su centro atrás lo llevó Keita dentro de la portería.

La segunda parte sólo tuvo dos diferencias con la primera. Por un lado, las dos estiradas del Zaragoza que obligaron a Valdés a trabajar en su reaparición, sobre todo en un mano a mano Con Sinama Pongolle que salvó con el pie. Como siempre, ahí estuvo Víctor cuando se le necesitó. La otra diferencia fue que el Barça no marcó y por eso se mantuvo cierta tensión. Al Zaragoza le iba mal el 1-0, pero no horrible. Otro gol hubiera sido su fin, pero con sólo uno de desventaja mantenía la esperanza de cazar alguna contra que finalmente no llegó. El equipo azulgrana jugó con una velocidad menos y pese a todo su gran problema fue la falta de puntería. Lo intentó sin éxito con las entradas de Alves, los regates de Messi o los tiros de Villa cuando salió por Bojan, que también tuvo una buena oportunidad. Con el gol de Keita fue suficiente para salvar un día incómodo. Ahora sólo existe el Arsenal.

Guardiola, de vuelta al hospital
Fue como una aparición en el banquillo. Pep Guardiola no quiso abandonar a su equipo en el encuentro ante el Zaragoza y «se escapó» del hospital para estar al lado de los jugadores. Rígido, sin apenas movilidad, limitó sus salidas al área técnica, que eran cosa de su ayudante, Tito Vilanova. Después, al finalizar el encuentro, desandó el camino. Vuelta al hospital para continuar con la recuperación. El martes, otra vez en el Camp Nou para enfrentarse al Arsenal.



- Ficha del partido:
1. Barcelona: Valdés; Alves, Piqué, Milito, Maxwell (Abidal, min.75); Xavi, Mascherano, Keita; Pedro (Iniesta, min.86), Messi y Bojan (Villa, min.65).

0. Zaragoza: Doblas; Diogo, Jarosik, Da Silva, Lanzaro, Obradovic; Pinter (Edmilson, min.55), N'Daw, Ander Herrera (Jorge López, min.71), Bertolo (Uche, min.50); y Sinama-Pongolle.

Árbitro: Fernando Teixeira Vitienes, del comité cántabro. Mostró cartulina amarilla a Milito (min.57) y Lanzaro (min.90+).

Gol: 1-0, min.43: Keita.

Incidencias: partido correspondiente a la vigésimo séptima jornada de la Liga, disputado en el Camp Nou ante 78.965 espectadores, según datos facilitados por el Barça

El palco de honor estuvo ocupado exclusivamente por mujeres, en el día de homenaje del Barcelona a sus asociadas. Ello motivó que los directivos ocupasen sus ubicaciones en el estadio.