Las ONG se preparan para la oleada de los «sin techo»

VALENCIA- Las personas que viven en la calle se llevan la peor parte de las inclemencias del tiempo. Los servicios sociales y las distintas ONG que trabajan en su ayuda se preparan para la llegada de un mayor número de usuarios. Así, la Casa de la Caridad de Valencia confirmaba ayer hallarse al completo desde hace semanas, aunque ante estas situaciones siempre reservan un par de plazas en caso de emergencia. Al respecto, Cristina Sánchez, coordinadora de trabajo social de la entidad, explicó que a los que no se pueden atender, se les deriva a los servicios municipales. Así, por ejemplo, el Ayuntamiento de Valencia ha hecho un especial hincapié en el reparto de mantas y sacos de dormir -en lo que va de año ha distribuido 17 y atendido a 92 personas en la calle, de las que más de la mitad rechazaron «cualquier tipo de ayuda»-.
Esta atención se lleva a cabo en total coordinación con la Policía Local, tanto con el grupo X4 como con cada una de las patrullas nocturnas. Para la puesta en marcha de la «Operación Frío» se cuenta con las 500 plazas de acogida disponibles entre diferentes albergues y entidades. Además, Metro Valencia mantendrá abiertas durante toda la noche las estaciones de Turia y Alameda.
Varios equipos de la Cruz Roja, compuestos básicamente por voluntarios, recorren las calles de diversas localidades de la provincia de Valencia, entre ellas Valencia, Torrent, Alzira y Oliva, para interesarse por aquellas personas sin techo que se vean sorprendidas por el intenso frío.
Además de ofrecerles una café, leche caliente y una manta para ayudarlas a entrar en calor, los voluntarios acompañan a aquellas que lo deseen a algún sitio donde guarecerse. En las últimas ocasiones en las que el plan fue puesto en marcha, más de cien personas recibieron atención directa cada noche y alrededor de doscientas más, pertenecientes a otros colectivos vulnerables, de manera indirecta.
En Casa de la Caridad consideran necesario aumentar los dispositivos especiales, pero agradecen que la solidaridad de los valencianos se mantenga pese a la crisis. Eso sí, las donaciones en efectivo son ligeramente inferiores, pero contribuyen con comida o mantas, «que son siempre bienvenidas». Por su parte, Cáritas recibió hace dos semanas 600 mantas de una fábrica de Ontinyent, que ya distribuye.