El PSC se aferra ahora a Hereu para restablecerse del 28-N

El alcalde de Barcelona clausuró ayer la V Convención Municipal del PSC enfundado en el papel de responsable político de la campaña. Lo hizo con un discurso donde criticó con firmeza la política de recortes del Govern de Artur Mas y a través del cual reivindicó su liderazgo. «Yo, Jordi Hereu, ciudadano de Barcelona, lo pienso dar todo por la capital de Cataluña, por el "cap i casal"de Cataluña que es Barcelona», subrayó, tras lo cual recibió una calurosa ovación.

Hereu defendió su papel de líder asumiendo el rol de criticar al enemigo –en este caso el Govern de CiU–. Avisó al equipo de Mas de que «no nos tendrán enfrente cuando vengan –al Ayuntamiento de Barcelona–, como ya me ha pasado, con una libretita a hacernos de contables». «Yo pensaba que éste era el Govern de los mejores políticos, no de los contables», lamentó.

El Govern de los «contables»
Hereu amonestó a los consellers que le han ido a ver como alcalde de Barcelona. A Lluís Recoder, conseller de Territorio y Sostenibilidad, le pidió que los recortes no afecten a la Línea 9 del Metro; a Boi Ruiz, responsable de Sanidad, que no paralice la ampliación del Hospital del Mar ni del Clínic, y a su ex compañero Ferran Mascarell, titular de Cultura, que fuera a verle sin «ninguna idea para potenciar a Barcelona como capital cultural».

Hereu también cargó contra sus adversarios en la carrera electoral. Se presentó «ilusionado» ante un Xavier Trias (CiU) «débil» sobre quien avisó que será «el alcalde de los recortes». Y sobre el eslogan de Alberto Fernández (PP) «Recuperemos Barcelona» preguntó si quiere recuperar la ciudad de los años 70. Pese a las críticas al PP, el PSC le teme y por eso reivindica la seguridad como valor de la izquierda en su programa marco.