Actualidad
Un Sherlock Holmes a todo gas
Robert Downey Jr. vuelve a colgarse el traje de Sherlock Holmes. La peculiar interpretación que el director Guy Ritchie hizo del personaje creado por Arthur Conan Doyle caló en la crítica y en la taquilla por lo que el equipo no ha tardado en presentar la secuela del detective más famoso de todos los tiempos.
Detrás del atípico y atractivo doctor Watson, de nuevo está Jude Law. Pero en esta ocasión, el protagonismo femenino se concentra en Madam Simza Heron, una misteriosa gitana a la que da vida Noomi Rapace, la actriz sueca, que se dió a conocer con la saga «Millenium» y el personaje de Lisbeth Salander, se embarca así en su primera producción internacional con un papel que aceptó con bastante respeto. «Hace tres años no sabía decir ni una palabra, pero todo el equipo se ha portado genial conmigo. Había una ambiente muy familiar así que me olvidé del hándicap del idioma y me pude centrar en el personaje. La verdad es que cuando me llamaron Robert y su mujer –que es la productora– para ofrecerme el papel no me lo podía creer. Siempre les había admirado», explicó Rapace.
La actriz vuelve a demostrar su fuerza interpretativa, pero ahora despliega una feminidad muy diferente. Al reparto también se incorpora Jared Harris («El increíble caso de Benjamin Button») para interpretar al notorio profesor Moriarty.
Cumbre de ideas
Pese a las caras nuevas, detrás de las cámaras Ritchie ha vuelto a contar con los mismos nombres como Sarah Greenwood, directora artística o el compositor Hans Zimmer, ambos nominados en 2009 para los Oscar. «Reunirnos de nuevo ha sido increíble –dijo el director– todos teníamos muchas ideas que aportar. Sherlock Holmes ofrece muchísimas posibilidades. Con la primera película disfruté una barbaridad, pero tenía la necesidad de explorar más el personaje y ofrecer a la gente algo que no hubieran visto antes». Según Downey, se ha querido mantener el tono visceral, pero se han añadido más dosis de acción, en la que ambos protagonistas han recurrido más bien poco o nada a dobles.
En este sentido, Law matizó que se ha tratado de hacer una película más física. «Nos hemos aprovechado de que la relación entre Holmes y Watson ya estaba explicada para poder dar un paso más y confiar en nuestros instintos y dejarnos llevar», recalcó. Y tanto ha volado la imaginación que, por primera vez, el detective y su fiel ayudante abandonan la mítica calle londinense de Baker Street para recorrer Francia, Alemania y Suiza.
Eso sí, no se ha obviado tampoco la parte romántica. «Holmes crea un problema entre Watson y su mujer, pero hemos encontrado una manera para que el público no sea demasiado crítico con él. Es alguien que necesita que le cuiden para poder hacer aquello que se le da mejor», dijo Downey.
La fórmula parece que funciona porque el primer fin de semana en la cartelera estadounidense lideró la taquilla y recaudó 40 millones de dólares (30,7 millones de euros), una cifra considerable, aunque bastante por debajo de los 62 (47,6 millones de euros) logrados por el filme original tras su estreno en 2009.
Buena cara
Guy Ritchie atraviesa un buen momento tras los rumores que apuntaban a que padecía una depresión tras su divorcio con Madonna. Ha logrado el éxito, profesional y personal, además de ser padre por tercera vez con Jacqui Ainsely.
✕
Accede a tu cuenta para comentar