El PP garantiza una financiación justa sin CiU

BARCELONA – Desde el distinguido cuadrilátero del Círculo Ecuestre, el candidato del PP por Barcelona, Jorge Fernández, exhibió ayer su habilidad como púgil con un gancho de derecha a CiU y un crochet de izquierda al PSC con los que tumbó a ambos partidos. Fernández trató de neutralizar el último anuncio del PSC diseñado por José Zaragoza, que vuelve a apelar el miedo al PP, al asegurar que el voto a Mariano Rajoy garantiza la defensa de los intereses de Cataluña.

Además de golpear al autor del célebre eslogan socialista «Si tú no vas ellos vuelven», que dio réditos en las últimas elecciones generales, Fernández tumbó a CiU que insiste en postularse como el único partido capaz de defender a las duras y a las maduras a Cataluña. Lo hizo apelando a los orígenes gallegos de Rajoy para acreditar que cuenta con una «sensibilidad periférica» que le hace ser consciente de la necesidad de que Cataluña debe sentirse bien tratada para que se involucre en el proyecto estatal.

Primero, salir de la crisis
Fernández acabó noqueando a CiU tras asegurar que el PP «no necesita intermediarios porque tiene voluntad política de llegar a acuerdos» con Cataluña. Incluso, sobre una financiación más justa. Restó importancia al nombre que se le dé al nuevo modelo de financiación que el PP, según confirmó, tiene la voluntad de negociar para Cataluña. Tanto le da que se le llame pacto fiscal o concierto económico.

 «No soy partidario de debates nominalistas, sino de debates conceptuales», afirmó Fernández, tras garantizar que si Rajoy gana el 20-N trabajará para que Cataluña tenga una financiación mejorada.

A una semana de que el PP presente su programa electoral, evitó hablar de si el modelo de financiación que apoyaría el PP va en la línea del pacto fiscal que defiende CiU, que persigue consensuar la autonomía fiscal. Sí apuntó a decir que el PP tiene la voluntad política de pactar un modelo que satisfaga a Cataluña. Aunque avisó de que antes de empezar a negociar hay que salir de la crisis porque la caja está vacía y lo único que se puede repartir es miseria, se avino a poner límites a la solidaridad para que no ponga en riesgo el crecimiento económico de Cataluña ni su competitividad. Admitió que no puede ser que si Cataluña es muy solidaria, baje en el «ranking» de renta per cápita porque va en contra del interés general. Ante un nutrido grupo de empresarios, dijo que si Cataluña ha de actuar como motor de crecimiento, «a España le interesa que esté bien financiada». Pero para estar bien financiada, el país debe recuperarse económicamente, y para cumplir este requisito es condición «sine qua non» un «cambio político».

Fernández explicó que no será fácil sacar a España de la crisis, en caso de ganar, pero si el PP logró reducir la tasa de paro del 22 por ciento que encontró cuando llegó al Gobierno en 1996, hasta un 11 por ciento, ahora se ve capaz de repetir la misma hazaña. Entre sus fórmulas cuenta con impulsar una reforma tributaria, una ley para los emprendedores, recortar un 20 por ciento los diputados del Congreso –de 350 a 300– y reducir en 20.000 los cargos electos locales. «Hay suficientes loros para dejar sin chocolate», ironizó.

Rajoy regresa a Cataluña
En las pasadas elecciones autonómicas, Mariano Rajoy hizo tantas visitas a Cataluña que su familia acabó llamándole cariñosamente «el catalán». Ahora, el candidato del PP a la Presidencia del Gobierno ha de repartir sus visitas por todo el territorio, pero no olvida el papel crucial que tiene Cataluña, 47 diputados que pueden dar la mayoría absoluta al PP. Por eso, este fin de semana volverá a Cataluña como ejercicio de precampaña. Hoy, estará en Tarragona, donde se hará una fotografía con la candidatura del PP en esta provincia encabezada por Alejandro Fernández. Luego ofrecerá una conferencia en X Jornada Empresarial Gresol, que tendrá lugar en el Pabellón Santa María del Mar de Coma-Ruga (Tarragona). El sábado dará un mitin en Cerdanyola del Vallès (Barcelona).