Delicada comida navideña

Si digo esto no podré dirigir el siguiente partido», aseguró; y lo hizo a unas horas de la tradicional comida navideña de las primeras plantillas de fútbol y baloncesto con los responsables del club. Las cámaras estaban invitadas y había que sonreír, aunque forzadamente y sin cruzar las miradas mientras el piloto estaba en rojo. Todo sucedió en el antepalco del Bernabéu. Valdano y «Mou» compartieron mantel y mesa, uno enfrente del otro. Sin más. La charla entre el presidente y el técnico, de existir, fue antes del almuerzo, ya que ambos fueron casualmente los últimos en llegar.

Sí queda una reunión pendiente, más pausada y extensa, en la que el entrenador quiere contarle a Florentino Pérez cómo ha sido su vida en el club durante estos seis meses. Aseguran que al presidente le ha pillado la pataleta de Mourinho con el pie cambiado. Sabía desde que lo contrató a qué se exponía, pero no esperaba con tanta premura que el técnico opositara a una plaza de nueva creación, la de mánager general, y poderse cargar así mandos intermedios – Valdano y Pardeza en este caso–. El portugués quiere tratar directamente con el presidente la necesidad de fichar un «9», un «3» u otro mediocentro de creación sin que Valdano le asegure que no hay dinero y que la filosofía es utilizar la cantera para cubrir las necesidades invernales. Mourinho no necesita ni quiere una dirección deportiva.

Y si en el Real Madrid se daba la callada por respuesta al malestar de Mourinho, Emery, el técnico del Valencia, sí opinó: «La suya es una postura llorona». Caparrós, el entrenador del Athletic, lo atribuyó a uno más de los «montajes futbolísticos» de Mourinho. No fue la única crítica. Para Xavi, «Mou» no va a «pasar a la historia del fútbol porque no aporta cosas nuevas. Él gana, claro, porque está en equipos como el Chelsea, el Madrid o el Inter y es un gran entrenador, pero no ha hecho nada diferente como Ferguson, Sacchi, o Guardiola, que lo han renovado». Cruyff tampoco quiso dejar pasar el día para referirse al portugués. De él dijo: «Mourinho no es un ejemplo como Pep o Del Bosque».


«Mou» saluda; Valdano, mira
El Real Madrid celebró ayer la comida navideña para empleados y jugadores de las distintas secciones del club. Y el técnico, José Mourinho, protagonista de las últimas horas, no dudó en acudir a la mesa donde se encontraba el presidente de honor, Alfredo di Stéfano, para estrecharle la mano. Casillas no pierde detalle de la escena, lo mismo que Jorge Valdano, a quien el portugués dirigió sus dardos el domingo.