Ruz reactiva el «Faisán» y deja a la Guardia Civil investigar el chivatazo

MADRID- Cuatro meses ha tardado el juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz en digerir el varapalo de la Sala de lo Penal, que el pasado noviembre revocó por falta de pruebas el procesamiento de tres mandos policiales acordado por el magistrado en relación al supuesto chivatazo que alertó a ETA de una operación contra su red de extorsión en mayo de 2006.

 En un auto notificado ayer, el instructor del «caso Faisán» (nombre del bar de Irún donde, supuestamente, se produjo el soplo) encarga a la Guardia Civil que elabore antes de dos meses un informe sobre los hechos ya investigados por la Policía. En la resolución, el juez rechaza de nuevo –como era de prever– la solicitud instada por Dignidad y Justicia de que llame a declarar al diputado del PSOE Antonio Camacho, que en esas fechas era secretario de Estado de Seguridad y mano derecha del ministro Rubalcaba. Del mismo modo, el instructor –que deberá abandonar la Audiencia dentro de poco cuando se adjudique la plaza que ha dejado vacante Baltasar Garzón y que él ocupa de forma interina– ha citado a declarar el próximo día 26 a Carmelo Luquin, yerno del dueño del Faisán.

El magistrado también ha convocado a dos miembros del equipo investigador que se encontraban en el lugar de los hechos, los mandos de la Unidad Central de Información (UCI) que participaron en la operación y los funcionarios de la Unidad Central de Apoyo Operativo (UCAO) identificados en las actuaciones como «Sr. Tirado» y «Sr. Martínez Marty», informa Efe.

Operación fallida con Rubalcaba en Interior
El chivatazo a ETA se produjo el 4 de mayo de 2006 en el bar Faisán de Irún e impidió el desarrollo de una operación policial contra el aparato de extorsión de ETA. En aquel momento, Alfredo Pérez Rubalcaba estaba al frente del Ministerio del Interior. Según el juez, el chivatazo «impidió llevar a cabo la detención» de los integrantes de la red de extorsión y «la posible incautación de dinero procedente de alguna extorsión reciente, pudiendo facilitar que el mismo revirtiera en la propia organización terrorista».