Santo Domingo

Pellegrini séptimo entrenador que deja el club con Florentino

El chileno Manuel Pellegrini es el séptimo entrenador que deja el Real Madrid durante un mandato de Florentino Pérez, uniéndose así a la lista iniciada por Vicente Del Bosque y que completaron nombres como José Antonio Camacho, Vanderlei Luxemburgo o Juan Ramón López Caro.

Durante sus seis primeros años de presidencia (2000-2006), Florentino Pérez tuvo a seis entrenadores. El primero, el actual seleccionador nacional, Vicente del Bosque, que ya era técnico del equipo, logró, entre otros títulos, dos Ligas, dos Ligas de Campeones y una Copa Intercontinental, y duró hasta 2003.En la temporada 2003-2004 fue el turno del segundo de Sir Alex Ferguson en el Manchester United, el portugués Carlos Queiroz, que sólo estuvo esa campaña.Breve fue también el paso de José Antonio Camacho, quien dirigió al equipo en tres partidos de Liga y uno de 'Champions' antes de renunciar al cargo. Su sustituto, Mariano García Remón, estuvo cien días al frente del equipo y, a finales de 2004, fue destituido.La salida de García Remón supuso la llegada del brasileño Vanderlei Luxemburgo, que entrenó al equipo hasta diciembre de 2005, cuando fue sustituido por Juan Ramón López Caro.Pellegrini se convierte ahora en el séptimo entrenador que deja el equipo con Florentino Pérez como presidente, tras completar una temporada en la que se consiguió el récord de puntos del equipo blanco en Liga, pero no se logró ningún título, pese a las aspiraciones iniciales del equipo.Según afirmó el presidente del conjunto blanco, el portugués José Mourinho se convertirá en el próximo técnico del club. Pellegrini, condenado por fallos en partidos decisivosEl entrenador Manuel Pellegrini ha sido la primera víctima de la discreta temporada del Real Madrid, en la que el chileno ha sido condenado por los estrepitosos fallos del equipo en momentos puntuales, pero decisivos. Pellegrini llegó como la opción 'B', de la mano de Jorge Valdano, después de que que no fructificasen las preferidas de Florentino Pérez, la terna Arsene Wenger, Carlo Ancelotti o Jose Mourinho, que se perfila ahora como el sustituto del chileno. "Habría que ser muy soberbio para pensar que el Real Madrid sólo fuera a mirar a un técnico", aseguraba en su presentación, sabedor de que, aunque fue el primer fichaje de la nueva Junta, anunciado apenas unas horas después de su proclamación, no era el gran deseado. "La presión me motiva, no me achica. Llego en el momento justo, con el convencimiento de que tenemos que lograr la excelencia", añadía, cumpliendo un sueño, pero el nuevo proyecto no ha tenido tiempo de asentarse ni el juego del equipo ha alcanzando para cumplir las expectativas.

"Es un profesional inteligente, trabajador, equilibrado, que cuida la pelota y propone un fútbol elegante", consideraba por su parte Florentino Pérez, asegurando que se trataba de un técnico que respondía "muy bien a lo que es la cultura"de la entidad.

Sin embargo, el primer 'cañonazo' en la línea de flotación del equipo lo recibió en el ya llamado 'Alcorconazo', un 4-0 que se recordará en los anales de la historia del club y que el equipo no fue capaz de remontar en la vuelta (1-0).

Unas semanas después, el equipo dio buena imagen en el Camp Nou, pero sumó una derrota (1-0) que al final de temporada se antojó decisiva. Además, el equipo volvió a estrellarse en el 'muro' de los octavos de final de la Liga de Campeones y ante un rival inferior, como el Olympique de Lyon, lo que prácticamente sentenció al chileno.

La gran campaña liguera del equipo, sobre todo el casa, podría haberle salvado, pero el 0-2 del segundo 'clásico', en el que fue el único partido que no ganó en el Santiago Bernabéu, ya fue la antesala de su adiós, confirmado tras perder la Liga y anunciado hoy. Además de los resultados deportivos, Pellegrini ha tenido que hacer frente a innumerables críticas, pero sobre todo porque en la ya comparación con el FC Barcelona siempre salía como perdedor. De hecho, llegó a asegurar que al público del Bernabéu no le gustaría que el equipo blanco jugara como el azulgrana. Durante semanas, el 'Ingeniero' apeló al 'puntaje', a ser el equipo más goleador (102 tantos al final), pero no llegó a convencer ni en el club ni a la opinión pública, pese a que su discurso apenas varió y a que siempre eludió polémicas tanto externas como internas.

Otros momentos célebres de sus meses en el club fue su definición como "titularísimo"del capitán Raúl, algo que no fue cierto, a pesar de que después explicó que con ese adjetivo se refería al hecho de que tenía las mismas posibilidades que el resto de estar en el once titular.

También tuvo que hacer frente a la polémica por el supuesto enfrentamiento con Guti al ser sustituido éste en Santo Domingo y la posterior misteriosa lesión del canterano, que estuvo semanas fuera de sus planes. O con Kaká, al que no le sentó bien ser cambiado en la vuelta ante el Lyon y luego, pese a estar en el parte de bajas, filmó un anuncio publicitario, o con Lass Diarra y Fernando Gago, con el segundo condenado al ostracismo toda la campaña menos en la recta final, quitando el puesto al francés, titular al principio y que 'desapareció' del once tras el partido ante el Sporting.

De esta forma, la trayectoria del chileno termina prácticamente un año después de su llegada procedente del Villarreal, donde había protagonizado cinco temporadas bastante exitosas, en las que cogió a un equipo que militaba en la mitad de tabla y lo dejó en zona europea.