López se enroca y no adelantará elecciones

VITORIA-El lendakari Patxi López confirmó que seguirá al frente del Gobierno vasco para cumplir sus objetivos «hasta el final», sin aclarar si supone agotar la legislatura hasta febrero y sin contemplar, de momento, un adelanto electoral que le reclamó el líder del PP vasco, Antonio Basagoiti, al dar por roto el acuerdo que solventaba la minoría parlamentaria del PSE, que suma 25 de los 75 escaños.

Con una legión de periodistas y su gabinete enfrente, el lendakari, más cómodo que dolido con la nueva situación, cargó contra su ex socio y le acusó de haber infringido el acuerdo por el cambio al anteponer los recortes del Ejecutivo central al autogobierno vasco. López señaló que no atenderá la llamada de Basagoiti si es para hablar de adelantar los comicios y advirtió de que «nadie en la sombra» puede obligarle a dar ese paso porque es su potestad exclusiva. Además de afear al PP por anunciar la ruptura al margen de «la cortesía política» y sin previo aviso, dio a entender que está libre de ataduras y de relaciones preferentes.

De hecho, el lendakari despachó la oferta de los populares de negociar una salida «digna» de Ajuria Enea y «ordenada» para cerrar los proyectos legislativos urgentes, con un «no hay voladuras controladas». Considera así que el pacto y sus derivadas están rotas por completo y a partir de ahora hablará con «todos» por igual para intentar sacar adelante sus proyectos y defender el Estado del Bienestar. Además de rechazar someterse a la cuestión de confianza solicitada por el PNV, al que insta a presentar una moción de censura, descartó hoy por hoy disolver el Parlamento vasco para no entrar en los «cálculos partidistas» que otros pretenden.
Pero lo cierto es que su discurso, centrado en la economía, en la que ha encontrado su filón, parecía enmarcado en un mitin, cuyo único objetivo era cargar contra el PP y el Gobierno central.

Así, tras sentirse legitimado por los intereses de los vascos para seguir gobernando y hacer frente a la receta anti crisis del presidente Rajoy, López clamó: «Mientras haya un Gobierno socialista en Euskadi no vamos a cerrar quirófanos, ni aulas de los colegios, ni los jubilados tendrán que pagar sus medicinas. Por mucho ruido que haya, no tendrán ningún efecto los recortes. Y no es hacer oposición a un Gobierno, sino defender los intereses de los vascos». Respecto al balance de los tres años al frente del primer Ejecutivo vasco no nacionalista, al que llegó gracias al pacto con el PP, nota más que positiva ante logros como el fin de ETA y la normalidad política. «Ha merecido la pena», concedió desde la Lendakaritza en Vitoria.

Uriarte resta «peso decisivo» a las víctimas
El obispo emérito de San Sebastián, Juan María Uriarte, considera que las víctimas del terrorismo tienen «derecho a ser escuchadas», pero «no les corresponde tener un peso decisivo» en el proceso pacificador, «ni inhibir los movimientos del Gobierno que puedan conducir a la reconciliación». Uriarte, que medió entre el Gobierno de José María Aznar y ETA durante la tregua de 1998-1999, hizo esta aseveración en una conferencia que ofreció ayer en San Sebastián. También señaló que en este momento no hay un acuerdo sobre quiénes son las víctimas e indicó que, para identificarlas, no habría que atender «a la causa defendida», sino «al sufrimiento hondo padecido en esta confrontación» como consecuencia de la violencia de ETA, los GAL y otros grupos y de los «excesos policiales».