Talgo obligado a volverse hacia La Meca

La suspensión por parte de Renfe del concurso para la compra de diez trenes de alta capacidad para el trayecto de AVE Madrid-Barcelona-París ha supuesto un duro varapalo para el sector. Por el contrato de 270 millones, el mayor licitado por la operadora desde 2003, pujaban seis fabricantes, entre ellos el español Talgo, que ha desarrollado una plataforma pensando en líneas de estas características: el Avril. Capaz de alcanzar los 380 kilómetros por hora, este tren, que empezará a rodar en pruebas en 2011, podrá llegar a transportar a 735 pasajeros gracias a su novedosa distribución de cinco butacas por fila si las necesidades lo requieren. La intención de Talgo era estrenar el Avril en la línea Madrid-París para usar el AVE español, que goza de gran prestigio, como escaparate para abrir otros mercados internacionales. Sin embargo, el recorte de Fomento ha dado la vuelta a los planes de Talgo, que ahora ha dejado de mirar al norte y ha puesto sus ojos en el este, en La Meca.«AVE del desierto»En el año 2006, la ferroviaria de Arabia Saudí SRO planteó la unión mediante el uso del tren de alta velocidad de las dos principales ciudades santas del islam: La Meca y Medina. Y tras cuatro años de preparación, el pasado día 3 se cerró el plazo de presentación de ofertas al concurso para la construcción y explotación por un periodo de doce años del denominado Haramain High Speed Rail (HHS), más conocido como «AVE del desierto», que cuenta con un presupuesto de unos 5.000 millones de euros. De los cinco consorcios que inicialmente mostraron interés en el proyecto, sólo quedan dos: uno francés, capitaneado por Alstom y la operadora estatal gala SNCF, y otro español que encabezan Renfe, Adif y Talgo como proveedor de material rodante. Hasta hace una semana, las opciones del consorcio español de hacerse con el proyecto parecían discretas. Pero la retirada del competidor chino, que se perfilaba como el favorito, con un proyecto de tren con tecnología propia y a un precio muy competitivo, ha mejorado notablemente las opciones del consorcio español. En su haber cuenta no sólo con un modelo de alta velocidad considerado como uno de los mejores del mundo, el del AVE español, sino también con un tren como el Avril que, según Talgo, cuenta con «indudables ventajas» sobre sus rivales por su capacidad y eficiencia: su peso es un 30 por ciento inferior al de sus competidores (aerodinámica y menor consumo), y al no tener escalones para acceder al convoy su tiempo de parada en estación se reduce un 20 por ciento.Objetivo, los peregrinosLa línea de alta velocidad ferroviaria que proyecta Arabia Saudí tiene un objetivo fundamental: descongestionar dos ciudades santas para el islam como La Meca y Medina, que anualmente reciben ocho millones de peregrinos. Con tal flujo de viajeros, el éxito económico del proyecto parece, a priori, prácticamente asegurado. Técnicamente, la línea, cuya entrada en servicio está prevista para 2013, se enfrenta a dos importantes desafíos: la entrada en ambas ciudades y su tránsito por el desierto.