Según este grupo de activistas opositores, 29 personas han muerto en Wady Barada, uno de los suburbios de Damasco, otras catorce han fallecido en Homs, seis en Gharba, en los suburbios de Deraa (sur), tres en los suburbios damascenos de Arbeen y Moadamiya), otros tres en Idlib (norte) y uno en Qamishly.

En el suburbio de Erbeen, en Damasco, según los Comités, las fuerzas de seguridad han registrado el hospital Al Raja y han detenido a decenas de heridos, mientras que en el suburbio de Wady Barda, también en la capital, catorce miembros del Ejército Libre Sirio, que aglutina a soldados desertores, han sido abatidos.

Por otra parte, en la localidad de Rastan, en Homs, las fuerzas de seguridad han empleado artillería pesada y una mujer y sus cinco hijos han resultado heridos al verse alcanzada su vivienda.

Previamente, los Comités de Coordinación Local, una organización que promueve las manifestaciones contra Al Assad, había indicado que al menos 7.100 personas han muerto en Siria desde que comenzaron las protestas a mediados de marzo del año pasado y a las que el Gobierno ha respondido con el uso de la fuerza.

Según este grupo de activistas opositores, entre los 7.100 fallecidos a manos de las fuerzas de seguridad figuran 461 menores --88 niñas y 373 niños--, 185 mujeres y 73 estudiantes. La cifra también incluye, según precisan en un comunicado, a 336 personas que han muerto por torturas en las prisiones y los centros de detención de la Policía secreta siria.

Por provincias, la que más 'mártires' ha registrado ha sido Homs, en el centro del país, con 2.454 muertos, seguida por Hama, con 1.015 fallecidos, e Idlib (norte), con 883.