Finanzas

Los acusados por el FROB niegan causar pérdidas al Banco de Valencia

Los acusados por el FROB niegan causar pérdidas al Banco de Valencia
Los acusados por el FROB niegan causar pérdidas al Banco de Valencialarazon

Valencia- Dos de los tres acusados por el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancario (FROB) -Domingo Parra y la empresa Fomento Urbano de Castellón, Fucsa, propiedad de la familia de Eugenio Calabuig- rechazaron ayer las acusaciones vertidas en la denuncia del organismo estatal sobre que algunos de los exdirectivos del Banco de Valencia pudieron provocar un agujero en la cercano a los 137 millones de euros en beneficio de otras sociedades, por lo que solicita el embargo cautelar de las cuentas bancarias y bienes de todos los denunciados.

El representante de Fucsa, Ángel Mompó, afirmó que la entidad se encuentra al corriente de todos sus pagos en concepto de amortizaciones de intereses por los préstamos concedidos por el Banco de Valencia, por lo que desmintió cualquier responsabilidad en el agujero de 137 millones de euros en la entidad valenciana.

En este sentido, precisó que desde el año 2008 han cumplido al cien por cien con las condiciones firmadas en los dos préstamos que el Banco de Valencia les ha concedido, indicando que ambos se encuentran «totalmente garantizados» con acciones de Aguas de Valencia. A pesar de que el representante de Fucsa confirmó que oficialmente no han recibido ninguna denuncia, sus abogados ya están estudiando las informaciones publicadas por los medios de comunicación para llevar a cabo acciones legales contra el FROB por la difusión de informaciones «falsas, erróneas y que incluyen acusaciones tendenciosas que benefician a terceros».

Mompó quiso corregir las cuantías de los préstamos que Fucsa y Agval han solicitado al Banco de Valencia y confirmó que las transacciones realizadas con la entidad están cifradas únicamente en 53 y 55 millones de euros respectivamente, concediéndose ambas «con absoluta transparencia, con pleno conocimiento de los socios y a precios de mercado». En concreto, ambos se otorgaron al 1'5 por ciento más la variación del Euríbor, aunque tras la reestructuración de los préstamos y acordar la devolución del capital en un único plazo en 2016, los intereses ascendieron al 5 por ciento.

Por su parte, el ex consejero del Banco de Valencia, Domingo Parra, emitió un comunicado para criticar la falsedad de las denuncias vertidas sobre su persona y negó que las operaciones con el Banco de Valencia carecieran de sentido económico o perjudicaran los intereses de la entidad.

Desmintió que él o su esposa, directa o indirectamente a través de Izpa o cualquier otra sociedad, se hayan enriquecido ni hayan percibido cantidad alguna del Grupo Calabuig por las operaciones entre el Banco de Valencia y ese grupo o con cualquier otro.