Valencia

Blanco aguantará al menos hasta el 21-N

Blanco, ayer, en una comida con militantes del PSOE en la localidad lucense de Becerreá
Blanco, ayer, en una comida con militantes del PSOE en la localidad lucense de Becerreálarazon

Madrid- El ministro de Fomento, José Blanco, se aferra al cargo, aunque el tiempo que resta para el cambio de Gobierno sea escaso. Pese al cerco judicial por el «caso Campeón» y las insistentes peticiones de dimisión, Blanco ha negado haber hecho trato de favor alguno y ha dicho que no va a hacer nada hasta después de las elecciones. Según él, «en cuanto pueda defenderse», volcará todo su «empeño» para que «el peso de la ley caiga sobre quien ha vertido esas infamias». Por ahora sus valedores son sus propios compañeros en el Ejecutivo. Así, el presidente del Congreso, José Bono, señaló ayer que el caso tiene «una entidad menor», y recalcó que una cosa es «hacer una gestión» y otra «hacerse rico a costa de la visita del Papa» a Valencia. Por su parte, el ministro de la Presidencia, Ramón Jáuregui, dijo tener «la firme convicción de que Blanco es un hombre honrado».

Desde el PP se pronunció la secretaria general, María Dolores de Cospedal, quien pidió gobiernos que no hagan «políticas de gasolinera». El secretario general de los populares en Madrid, Francisco Granados, reclamó al ministro que enseñe las facturas de los chorizos que supuestamente le regaló el segundo del empresario Jorge Dorribo –principal imputado en el «caso Campeón»– José Antonio Orozco, y le exigió que por «ética» presente su dimisión, informa Ep.