Ofensiva contra el «top manta»

barcelona- Fue una de las proclamas del nuevo Govern para este verano: ni una concesión al negocio del «top manta». La presión policial surge efecto y desde que la Generalitat anunció que quería acabar con la venta ilegal en las calles catalanas los resultados son más que notables.
Tras las múltipes actuaciones de los últimos tres meses, la Policía Nacional informó ayer de la detención de 12 personas pertenecientes a tres bandas que vivían exclusivamente de abastecer a los vendedores ambulantes ilegales, y que operaban de forma independiente en Barcelona, L'Hospitalet de Llobregat y Montcada i Reixac.
El alijo intervenido constó de siete torres de grabación, 17.000 DVD, 3.000 carátulas, 2.300 fundas, dos ordenadores, una fotocopiadora y una guillotina pertencientes a dos bandas dedicadas a la producción de venta y distribución de DVD y CD. También confiscaron 2.000 complementos de primeras marcas falsificadas procedentes de China, como monederos, gorras, relojes, cinturones, bolsos y polos, además de 250 gramos de droga sintética clasificada como metanfetamina.
La operación sobre Barcelona no es la única. El pasado jueves, durante la presentación de la campaña «Tiremos de la manta» en El Vendrell y Roses, comenzaron a aflorar públicamente las primeras consecuencias de la presión policial sobre la venta ambulante ilegal.
El concejal de Seguridad del Ayuntamiento de Roses, Àngel Tarrero, aseguró que en sólo un año, la presencia de «manteros» en el paseo Marítimo se ha reducido un 56,6 por ciento. Así, mientras en 2010 podían sumarse hasta 300 puestos de «top manta», ahora estos puestos de venta ilegal se han reducido hasta 130.
El número de vendedores ilegales en El Vendrell (Tarragona) también se ha desplomada. En declaraciones a «Rac1», el alcalde del municipio, Benet Jané, señaló que la presencia de vendedores ilegales ha pasado de los 400 del año pasado a los 25 que se registraron el pasado jueves.
«Todo el mundo se ha puesto las pilas y la tolerancia cero se está imponiendo en todas partes», afirmó Jané, que destacó que la negociación con los «manteros», tal y como planteó el tripartito el año pasado, «no se puede volver a repetir».
Ante la falta de ayudas existentes para combatir el fenómeno del «top manta», en 2010 algunos municipios reclamaron una reunión con la conselleria de Interior, liderada entonces por Joan Saura, aunque según quiso recordar Jané, se inumplieron las promesas.
La campaña «Tiremos de la manta», encabezada por la la Confederación de Comercios de Cataluña y la Generalitat, repartirá 200.000 díptico en catalán, castellano, inglés, alemán, ruso, francés y italiano para tratar de disuadir a los compradores de participar en la venta ilegal.