Parados de larga duración

Clases medias

La Razón
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El «estacazo al más débil», que es como Rajoy ha definido los recortes sociales materializados ayer mediante un decreto Ley que reduce el salario de los funcionarios, congela las pensiones y elimina ayudas sociales, como el «cheque bebé» o las prestaciones de la Ley de Dependencia, ha soliviantado a los sindicatos que estudian movilizaciones. Trabajan preparando una posible huelga general para otoño porque no les gusta el «ajustazo» debido a que desde su punto de vista lastrará la evolución de la economía española con efectos sociales perversos. Sorprende esta virulenta reacción, pues porque nada hay más perverso desde el punto de vista social que el crecimiento diario de las filas del paro y, sin embargo, mientras esto sucedía día a día en los tres últimos años Toxo y Méndez han estado bien callados. Los sindicatos admiten que el Ejecutivo debe reducir el déficit, pero defienden un aumento de impuestos para salir de la crisis. Se olvidan de que este Gobierno ha subido los impuestos sobre las gasolinas y el tabaco, el IRPF, y ahora va a incrementar el IVA, que afectará a todos por igual. Saben perfectamente que en España los ricos de verdad no pagan impuestos porque para Hacienda sólo hay 10.000 y que el peso impositivo recae sobre las clases medias, que ya no pueden más.