Cataluña

Mas da «un voto de confianza» a la nueva ERC para explorar acuerdos

El president aclara que está abierto a pactar con todas las fuerzas políticas

Mas, en una imagen de archivo, participó ayer en la reunión del grupo parlamentario de CiU celebrada en Girona
Mas, en una imagen de archivo, participó ayer en la reunión del grupo parlamentario de CiU celebrada en Gironalarazon

BARCELONA- La geometría variable es uno de los dogmas que guían a Artur Mas desde que se convirtió en presidente de la Generalitat. El PP ha sido, hasta ahora, su socio más relevante, ya que fue con Alicia Sánchez-Camacho con quien alcanzó un pacto para sacar adelante los presupuestos de 2011. Sin embargo, Mas no quiere esposarse con nadie, sino que quiere abrir el terreno de juego. En este contexto hay que entender la mano que tendió ayer a la nueva ERC que encabeza Oriol Junqueras: «Todo esta muy tierno todavía, aunque a esta dirección hay que darle un voto de confianza para que pueda desarrollar sus ideas, líneas estratégicas y actitudes».

Desde Girona, donde participó en la reunión del grupo parlamentario de CiU para preparar el debate de política general de la semana que viene, Mas puso en valor que en esta nueva era de Esquerra «parece que tiene claro que todas las etapas del tripartito son del pasado y que ahora hay que tener una actitud abierta y dialogante».

No obstante, el presidente de la Generalitat no quiso lanzarse a los brazos de nadie. Primero porque teme que ERC exija al Govern que aumente el gasto público para hacer más políticas sociales, algo que Mas no concibe, ya que los recortes son, a su entender, la manera de «darle la vuelta a una situación complicada lo antes posible».

El aspecto que más une al Govern de CiU con ERC es, sin duda, la reinvindicación de un nuevo pacto fiscal en la línea del concierto económico que está en vigor en el Paós Vasco. Pero esto no justifica por sí solo los retos que hay por delante. Por eso, Mas no cierra la puerta a nadie y recuerda que desde el primer día se manifestó partidario de «dejarse ayudar» por «todo el mundo».

El debate de política general, que empieza el martes con la intervención de Mas, pondrá de manifiesto las posturas de todas las formaciones. La presidenta del PP catalán ya avanzó que no habrá entendimiento si el Govern da prioridad a los proyectos soberanistas. Pidió, además, que los presupuestos de 2012 incrementen el gasto destinado a pymes y autónomos. Según Sánchez-Camacho, sería «un error» que CiU opte por pactar con PSC y ERC porque son ellos los responsables de haber dejado las finanzas públicas contra las cuerdas.

Lo cierto es que el Govern planea más recortes, sobre todo después de que la auditoría de Deloitte confirmara el gran desequilibrio de las cuentas y es difícil que la izquierda los asuma.