Normas por Marta ROBLES

Cuatro días de mundial y los tíos ya se han vuelto locos. No es que hayan cambiado en nada –siguen pensando como siempre con las pelotas, es decir, en pelotas–, sólo que ahora han decidido poner unas normas para «facilitar» la convivencia entre hombres y mujeres durante este mes, que ya corren por internet. ¿Cuáles son? Pues nada, que el Mundial ha tomado posesión de sus agendas, que nos vayamos apuntando las fechas en las que juega España porque no piensan ir a ninguna parte, ni aunque se case nuestra hermana o fallezca –Dios no lo quiera– nuestra abuela; que nos acostumbremos a mirar la sección deportiva de radio, prensa y televisión si queremos hablar de algo con ellos; que ni toquemos el mando porque es suyo y sólo suyo a todas horas; que si tenemos que pasar delante de la tele lo hagamos a cuatro patas con un plato de patatas y una cerveza en el lomo y sin hacer ruido ni distraer; que durante los partidos son ciegos y sordos aunque se caiga un niño o se incendie la casa; que es imprescindible que todos los días haya cerveza fría en la nevera; que si coreamos un gol cuando juega España no nos olvidemos que nuestros chicos son los de ROOOJO; que entendamos que las repeticiones de los goles son muuuy importantes y los resúmenes de por la noche también; que consideremos que vestir en chándal y camiseta de la selección está bien visto estos días y que no se nos ocurra comentar lo monos que son los futbolistas ni aunque ellos llamen en sueños a Sara Carbonero: a ellos esta chica, claro está, sólo les interesa como comentarista… Estoy… ¡Como una pantera! Eso sí, roja. Naturalmente.