País Vasco

Rubalcaba no se arrepiente «de nada»

Alfredo Pérez Rubalcaba está convencido que el caso del chivatazo del bar Faisán no habría producido ningún "escándalo político"de no haber sido él ministro del Interior: "Si existe es porque existo yo", ha defendido. Y aunque cree que puede haber una "deriva judicial"del caso, está convencido de que tiene "fallos jurídicos".

Por su parte, el nuevo ministro del Interior, Antonio Camacho, ni siquiera ha hablado del tema, porque "se está investigando judicialmente". En cambio, para Esteban González Pons (PP), Rubalcaba es un "traidor en términos políticos", y para Rosa Díez, Rodríguez Zapatero y Rubalcaba deben dar una "explicación".

El candidato socialista a la presidencia del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, está convencido de que el caso del chivatazo en el bar Faisán se habría olvidado de no haber sido él ministro del Interior. "El problema soy yo", ha explicado, para añadir: "Si el caso existe es porque existo yo, y si hoy, más que nunca existe, es porque hoy soy el candidato".

El miércoles, el juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz procesó a tres altos cargos de Interior, entre ellos el ex director de la Policía Víctor García Hidalgo y el jefe superior de Policía del País Vasco Enrique Pamiés, por avisar a través de una llamada telefónica de que estaba en marcha una operación contra el aparato de extorsión de ETA.

Para Rubalcaba, que no tiene "nada de lo que arrepentirse", es posible que el caso esté justificado judicialmente, pero ha recordado que este asunto terminó con "la detención de todo el mundo"y no causó "ningún problema" a la lucha contra el terrorismo. Además, la banda terrorista ETA está "a punto de acabar", y los funcionarios implicados están "irritados"porque llevan muchos años luchando contra ETA. Y aunque el chivatazo tenga una "deriva judicial", en su opinión "hay argumentos suficientes para entender que eso tiene fallos jurídicos".

"Por tanto, si existe es porque existo yo y si hoy, más que nunca, existe, es porque hoy yo soy el candidato, esa es la razón y nada más", ha expuesto Rubalcaba sobre las peticiones de responsabilidades políticas.

Al actual ministro del Interior, Antonio Camacho, también se le ha preguntado por este caso, pero ha rechazado hacer ningún comentario: "Soy el responsable del Ministerio del Interior, ni puedo ni debo hacer ningún tipo de declaración sobre un tema que se está investigando judicialmente".

Precisamente el PP ha presentado dos preguntas al actual ministro del Interior para pedirle explicaciones por el auto judicial. "¿Asume el ministro las actuaciones de sus subordinados en el 'caso Faisán' durante el tiempo que fue secretario de Estado de Seguridad?", reza la pregunta a la que se someterá en la próxima sesión de control.

Desde el Gobierno, los ministros de la Presidencia, Ramón Jáuregui, y el vicepresidente de Política Territorial, Manuel Chaves, han defendido a Rubalcaba. Así, para Jáuregui el auto del juez no tiene ningún sentido y no es más que "una suma de indicios más bien especulativos", por lo que tiene la "firme convicción de que será revocada".

"No puedo creer que personas que llevan toda la vida luchando contra el terrorismo y que tienen el honor de ser, incluso, víctimas de la violencia, puedan ser acusadas de colaborar con el terrorismo", ha afirmado el titular de Presidencia, que cree que es algo "sencillamente disparatado".

"La ciudadanía española tiene que saber que Rubalcaba ha sido el ministro que más y mejor ha trabajado por la derrota de ETA", ha expuesto, y ha asegurado que se está más cerca que nunca del fin del terrorismo "en gran parte por un trabajo muy bien hecho por parte del señor Rubalcaba".

Y Chaves cree que las acusaciones del PP por el caso Faisán se debe al "miedo"que le tienen al candidato socialista. Además, ha recordado que ni Antonio Camacho ni Rubalcaba "aparecen en la resolución judicial"y ha hecho hincapié en la presunción de inocencia, porque los tres acusados "son personas que han curtido su vida profesional luchando contra el terrorismo vasco y hay que respetar ese curriculum que tienen todos".

Por eso, para el ex presidente andaluz "todo proviene de algo que se está poniendo cada vez más de manifiesto, y es que el PP le teme al candidato del PSOE. Ese es el problema y no otro".

Otro que ha defendido a Rubalcaba ha sido el presidente del Congreso de los Diputados, José Bono, que cree que quienes están en la cacería del supuesto chivatazo policial a ETA "van a fracasar", porque el candidato socialista es "pieza de caza mayo y necesita otra munición y otros cazadores", y Bono ha hecho un juego de palabras: "Confundir a Rubalcaba con un faisán es muy equivocado".

No es esa la opinión de los populares. Para su vicesecretario de Comunicación, Esteban González Pons, Rubalcaba es un "traidor", aunque ha aclarado que únicamente "en términos políticos". El popular también ha hecho referencia a los policías y guardias civiles que "se juegan la vida en el País Vasco", pero lo ha hecho para afirmar que han tenido al frente a un ministro del Interior que "puede ser un traidor".

González Pons ha comparado el chivatazo con en el caso GAL, porque "es igual de grave que el caso Faisán". "Vamos a hacer exactamente lo mismo que en el caso GAL. En el caso GAL, no instamos acciones judiciales ni estuvimos en los procesos judiciales, ni hicimos nada más que pelear por los casos en el Parlamento", ha expuesto el portavoz popular, que ha explicado que intentarán que "la presión de la opinión pública y de los medios de comunicación acaben transformando la posición del Parlamento". Además, el auto judicial "es solo el principio", y el PP cree que puede haber más responsabilidades penales subiendo en la escala de mando del Ministerio.

A estas declaraciones de González Pons ha respondido Bono, que ha respondido que esas palabras "son muy calificables"desde "el terreno de la buena fe y de la cordialidad". Además, Rubalcaba "ha sido entre otras muchas cosas el más eficaz de los ministros contra los delincuentes y los terroristas".

LLAMAZARES: "NO LO VOY A ACEPTAR"
Desde otras formaciones políticas, las opiniones son dispares. Así, algunos no se creen que los policías hayan ayudado a ETA. Ese es el caso del diputado de IU Gaspar Llamazares, que ha expresado ante el Pleno del Congreso su confianza en la Policía y su incredulidad de que los policías se hubieran confabulado: "Me parece injusto y no lo voy a aceptar", ha expuesto, para añadir que "al igual que no hay una confabulación de médicos para matar, considero increíble que haya una confabulación de policías para colaborar con el terrorismo".

También se ha mostrado incrédulo con el auto el PNV. Así, el portavoz de esta formación en el Parlamento, Emilio Olabarría, ha apuntado que habría que "inhabilitar"a los representantes políticos que alientan "teorías conspirativas"rayanas en la "esquizofrenia" sobre una supuesta colaboración de la Policía con ETA. "Deberíamos considerar hasta qué punto las paranoias de determinados representantes políticos no deberían provocar su inhabilitación para el ejercicio de sus responsabilidades políticas", ha añadido.

Una opinión distinta tiene la líder de UPyD, Rosa Díez, que ha asegurado que Zapatero, Rubalcaba y Camacho "no pueden no dar una explicación política". "Los responsables políticos no pueden mirar para otra parte ya que hay una responsabilidad política clarísima por acción u omisión", ha afirmado Díez, porque en su opinión es "imposible que la cúpula policial pueda tomar decisiones de estas características sin conocimiento de sus mandos políticos".