Alimentación

Las comidas en «tupper» aumentan el riesgo de obesidad infantil

Los expertos recomiendan a los padres apostar por la variedad de alimentos

Muchas familias han aceptado la iniciativa como medida de ahorro
Muchas familias han aceptado la iniciativa como medida de ahorrolarazon

VALENCIA- El uso de los «tupperware» en algunos comedores escolares de la Comunitat será una realidad a partir de septiembre. La medida ha sido celebrada por numerosas familias que, ante los problemas económicos, han visto la oportunidad de ahorrar al tiempo que sus hijos siguen cuidados y atendidos en los centros escolares. Lo que muchos no se han preguntado todavía es qué pondrán en las famosas merenderas.

Los expertos nutricionistas han alertado ya, sin embargo, del importante aumento de casos de obesidad infantil que se pueden detectar con los años como consecuencia de la nueva forma de alimentación. «Se va a convertir en un quebradero de cabeza para los padres y los educadores» advierte la directora de Nutt Consejo Nutricional, Elisa Escorihuela.

El hecho de que en los últimos años hayan sido los comedores escolares los encargados de determinar las dietas de los pequeños ha provocado que ahora muchos padres tengan dificultades para decidir un menú adecuado a las necesidades nutricionales de sus hijos. Ante este hecho, los expertos en dietética recomiendan que se informen de cómo planificar las comidas y qué tipo de alimentos no deben escasear en las dietas.

«La falta de imaginación a la hora de cocinar y las fobias de los niños a ciertos alimentos disminuyen los posibles menús», reconoce Escorihuela ante las posibilidades que tendrán los padres a la hora de preparar la comida. El riesgo de cocinar siempre el mismo tipo de comida es el mayor riesgo que desde Nutt aprecian en esta iniciativa. De esta forma, recomiendan no abandonar la dieta Mediterránea de los menores «y no aceptar que coman sólo lo que les gusta».

Por supuesto, la conservación de los alimentos será otro de los principales problemas de la iniciativa por el alto riesgo de infecciones alimenticias que se pueden producir. Ante este hecho, los dietistas recomiendan adecuar las instalaciones con un importante número de neveras y microondas para facilitar la labor de los padres. «No todos los alimentos se conservan de la misma manera y algunos necesitan condiciones especiales de transporte y conservación».
En este sentido, desde el Colegio de Nutricionistas de Valencia recomiendan, además, «tener mucha paciencia con los niños» y trabajar de forma intensa con la Administración y los centros para evitar que se descuide la alimentación.

Las madres, como Pilar Martínez, reconocen, en cambio, que la posibilidad de que sus dos hijos adquieran ahora un mayor número de hidratos de carbono procedentes de la pasta y de los arroces, aumentarán. «Tendré que hacer comidas que se puedan comer frías y que las pueda dejar preparadas la noche anterior», afirma.

No obstante, son muchas las que están concienciadas de la necesidad de cambiar los platos «de caliente» a la hora de la cena. «Si por la mañana comen más ensaladas por la noche comerán fideos» recuerdan. Al fin y al cabo, son las primeras que entienden que es la salud de sus hijos la que está en juego.

 

Consejos de los nutricionistas
- Se debe incluir diariamente frutas y verduras en los menús n Los niños deben comer legumbres dos veces por semana n La pasta y el arroz usarlo como primer plato o como guarnición del segundo n El segundo plato debe estar compuesto de pescado, carne o huevos. El pescado azul como el salmón es fundamental n Usar la sal con moderación n Se debe incluir un trozo de pan y agua n De postre siempre debe haber fruta y de vez en cuando los lácteos como complemento n No repetir recetas para que los niños no se aburran n Utilizar técnicas de cocción sencillas, evitar los fritos y las salsas sobre todo las que contengan nata o huevo.