El Papa recibe hoy a Monti en medio de la polémica por la exención fiscal

Aunque esta es la segunda vez que Monti ve al Pontífice, a quien despidió el pasado 18 de noviembre en el aeropuerto de Roma cuando viajaba a Benin, es la primera que el primer ministro visita de manera oficial el Vaticano.

El nombramiento el pasado noviembre del católico Monti como primer ministro, en sustitución de Silvio Berlusconi, para afrontar la grave crisis económica italiana fue bien recibido en el pequeño Estado, que ve "con buenos ojos", según dijeron a Efe fuentes vaticanas, tanto al economista como a su equipo de ministros, entre los que destaca el católico Andrea Riccardi, fundador de la Comunidad de Sant'Egidio.

Las relaciones entre la Santa Sede e Italia son buenas, según las mismas fuentes, que subrayaron las palabras pronunciadas el pasado día 9 por Benedicto XVI ante el cuerpo diplomático acreditado en el Vaticano cuando pidió que Italia "siga apostando por una relación equilibrada entre la Iglesia y el Estado, constituyendo así un ejemplo que las otras naciones puedan mirar con respeto e interés".

Además de los asuntos bilaterales, en medios políticos italianos se da por hecho que Monti informará al Papa de las medidas económicas adoptadas para salir de la crisis, entre ellas un nuevo impuesto inmobiliario, denominado IMU, que supone la recuperación del viejo y abolido ICI (Impuesto de Bienes Inmuebles), del que han quedado exentos los inmuebles de la Iglesia.

El ICI, uno de los impuestos más criticados por los italianos, fue abolido para la primera vivienda en 2008 por Berlusconi. El hecho de que Monti lo haya recuperado con el nombre de IMU y haya excluido del mismo a la Iglesia ha levantado una oleada de críticas, especialmente del Partido Radical, que exige que la Iglesia italiana pague "como todos".

Italia no dispone de un censo completo de las propiedades de la Iglesia y, según algunos medios de comunicación, entre el 20 y el 30 % de todo el patrimonio inmobiliario italiano está en sus manos, repartido entre iglesias, edificios eclesiásticos, escuelas, universidades, hospitales, ambulatorios, centros deportivos e incluso hoteles y centros de recreo.

Según escribió el periodista del semanario "L'Espresso"Stefano Livadiotti en su libro sobre el Vaticano "I senza Dio", la Iglesia italiana se ahorra todos los años, como mínimo, 700 millones de euros al no tener que pagar el ICI.

Además de la Iglesia Católica, en Italia tampoco pagan el ICI, entre otros, las otras confesiones religiones, las embajadas, organismos internacionales, los cines y las organizaciones no gubernamentales.