Barcelona

La maquinaria de la cámara catalana empieza a rodar

Con la elección de Núria de Gispert como presidenta del Parlament el pasado jueves 16 de diciembre, arrancó la IX Legislatura. El mensaje que De Gispert envió en su primer discurso fue trabajo, trabajo y austeridad. Un día después de ser nombrada, se reunió con los presidentes de los grupos del PSC y PP. Esta semana seguirá la ronda de contactos

La Razón
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Aunque De Gispert no es la única que ha empezado a rodar. El nuevo Parlament ya ha registrado iniciativas. El grupo parlamentario del PP ha propuesto un dieta para la administración, suprimir el impuesto de sucesiones y donaciones y una iniciativa dirigida a reactivar la economía como es dar incentivos a la pequeña y mediana empresa. Son tres promesas electorales que Alicia Sánchez-Camacho repitió por activa y por pasiva allí por donde le llevó la campaña electoral. Tres propuestas, además, que comparten con el programa en materia económica de CiU, por lo que parten con ventaja para salir adelante. Por su parte, el grupo parlamentario de ICV, fiel a sus principios de ecologismo, ya ha registrado una propuesta de resolución para que el Parlament rechace la instalación del cementerio nuclear de Ascó. Se trata de una iniciativa de acuerdo con resoluciones aprobadas ya en la cámara catalana durante la legislatura en la que formaban parte del gobierno tripartito junto a ERC y el PSC. Pero ahora la aritmética parlamentaria es diferente. Conscientes de ello, los ecosocialistas piden al Parlament que inste al futuro gobierno a que despliegue las medidas políticas, administrativas y legales necesarias para hacer prevaler su decisión.