«Mi visión como médico puede mejorar la gestión sanitaria»

MURCIA- «Dar al paciente el tiempo que necesita y que de mutuo acuerdo salgamos ambos satisfechos de la consulta». Con esta máxima comenzó su labor como médico de familia José Antonio Alarcón, quien desde ayer dirige el Servicio Murciano de Salud de la Región de Murcia (SMS), un cargo que no formaba parte de sus planes. «Nunca me imaginé que llegaría aquí. No es que fuera un sueño, es que ni siquiera estaba en mis pensamientos», afirmó.-Y ahora que está al frente del SMS, ¿cuál es su principal objetivo?-Me enfrento al cargo con una gran responsabilidad y arropado de magníficos profesionales y eso hace que te pongas las pilas, aunque estaré especialmente dedicado porque quiero poder dormir tranquilo. En unos meses pondremos la bandera de abierto en los nuevos hospitales de Los Arcos y Santa Lucía, y el gran reto comienza cuando se abre el hospital.-¿Qué ofrecerán estas nuevas instalaciones?-Estarán dotados con las mejores tecnologías, los mejores profesionales... y la instalación de los circuitos de trabajo será lo más complejo. El 92 por ciento de las acciones que se hacen en el hospital son con metodología informática. Tenemos quirófanos de alta resolución, que permiten a los especialistas seguir una operación desde el salón de actos, o ver la radiología desde casa, por ejemplo. Parece ciencia ficción. Ambos hospitales nacen con la misma tecnología, con una gran revolución que nos permitiría «jugar a otra cosa». Esta tecnología también afectará a los centros de salud. La radiología, las analíticas, se ven desde el ordenador en muchos centros, como Caravaca de la Cruz, por ejemplo.-¿Cómo afecta al SMS la actual situación de crisis y los planes de austeridad del Gobierno?-Tenemos que hacer sostenible la sanidad, que es una de las joyas de nuestra corona, pero tenemos la seguridad de que el ciudadano murciano va a seguir teniendo una asistencia sanitaria considerada de las mejores del mundo. El usuario tiene que ver que hacemos esfuerzos para contener la crisis con un ejercicio de responsabilidad para asegurar la viabilidad del servicio. Llevaremos a cabo la revisión de nuestros procedimientos con un plan de mejora de modernización de primaria o de racionalización de medicamentos, por ejemplo, tenemos que trabajar desde la evidencia científica. -¿Significará eso un descenso de los servicios de especialistas?-No vamos ni a aumentar las listas de espera por recortes económicos, ni a aumentar las consultas externas; vamos a reducir los costes con los procedimientos administrativos de forma radical. Tenemos que sentarnos y cerrarlo, pero por ahora el único freno que tenemos es que no tenemos profesionales especializados. Con el aumento de población hay listo un plan de contingencias para el hospital y un plan de mejoras y modernización, que marcan la población atendida por cierto número de médicos, pero lo cierto es que faltan médicos especializados. En medicina no hay paro.-¿Cuál considera usted la principal carencia del SMS?-Es muy fácil criticar desde la barrera. Antes de llegar aquí pensaba que somos lentos en respuesta, por ejemplo para comprar un oftalmoscopio tardábamos 15 días. Hemos agilizado los procesos, pero yo entré en este entramado para poner mi granito de arena, porque ante todo soy médico, la vocación en gestión (que ya va camino de nueve años) surgió porque yo, como especialista, puedo compaginar la asistencia sanitaria con la gestión administrativa, ya que conozco la gestión clínica y los procesos asistenciales, y controlar eso con las inversiones de que disponemos de la mejor forma posible, es la labor que me han encomendado.

Las claves- Alarcón es licenciado en Medicina y Cirugía por la Universidad de Murcia, especialista en Medicina Familiar y Comunitaria, y diplomado en Gestión de Instituciones Sanitarias por la Escuela de Negocios de la Universidad de Navarra (IESE).- Destacan entre sus objetivos la consolidación de las gerencias de área, mejorar la asistencia a los pacientes y finalizar las diferentes fases de la oferta de empleo público abierto.