Sevilla
Los sindicatos arrancan su «otoño caliente»
Más de 10.000 trabajadores toman el centro de Sevilla para protestar contra la quiebra de las arcas municipales y el «deterioro» de los servicios públicos. Anuncian un otoño de larga «batalla»
SEVILLA- Advirtieron de que el otoño sería «caliente» y para empezar lograron movilizar su primer día a más de 10.000 personas. Los sindicatos CC OO-A y UGT-A se manifestaron ayer por las calles del centro de Sevilla para exigir soluciones reales a los problemas de las administraciones locales y en contra de los recortes en los servicios públicos, su «deterioro», y la merma en el empleo de los municipios.
La marcha arrancó a las puertas de la sede de la Presidencia del Ejecutivo andaluz, el Palacio de San Telmo, y finalizó delante del Ayuntamiento de la capital hispalense. Durante el recorrido, los miles de trabajadores convocados hicieron sonar silbatos, además de escenificar con ataúdes de cartón y marchas fúnebres el entierro de los servicios públicos.
En concreto, el secretario general de CC OO-A, Francisco Carbonero, explicó que con la protesta, englobada bajo el lema «En defensa del sistema público y por un empleo digno. ¡Movilízate!», los sindicatos pretendían rechazar «las políticas económicas y sociales que está aplicando el Gobierno de España e imponiendo la derecha europea». En ese sentido, Carbonero criticó las medidas que están implementando el PP y el PSOE «de mutuo acuerdo», a su juicio, en los consistorios andaluces con el fin de reducir las «políticas sociales, cuando más falta hacen, y de eliminar las políticas de igualdad, cuando más desigualdad se está generando».
Quiso hacer un llamamiento «a los dos grandes partidos» que gobiernan la mayoría de las administraciones locales andaluzas para que «no provoquen más despidos, no privaticen más empresas públicas y no jueguen con las conquistas sociales que se han conseguido». Y es que, según explicó, más de 60 ayuntamientos andaluces no pagan las nóminas a sus trabajadores, se han producido más de 800 despidos de personal laboral y no se han renovado miles de contratos, a lo que se ha unido «la privatización de los servicios de agua o basura».
Con esos datos, Carbonero exigió al Gobierno andaluz, al central y al PP, que «se empeñen en resolver esto». Por su parte, el secretario general de UGT-A, Manuel Pastrana, aseveró que no están dispuestos «de ninguna manera» a la «teoría de que las diputaciones tienen que desaparecer», que ha planteado el candidato del PSOE a la Presidencia del Gobierno para las próximas elecciones generales, Alfredo Pérez Rubalcaba.
Pastrana planteó que está en juego lo que va a ser España tras la crisis: «Un país con servicios para la igualdad y para los ciudadanos con mayores necesidades o exclusivamente sometido a los intereses económicos de unos pocos». Advirtió que la «batalla en calles e instituciones» va a durar hasta que se consiga que los servicios y el empleo público «no sean el objetivo de aquéllos que están adoptando medidas en beneficio propio». «Ésta va a ser la seña de identidad de los próximos meses», apoyó el secretario general de la Federación de Servicios Públicos de UGT, Julio Lacuerda, porque de «la crisis o salimos todos o no sale nadie», avisó. Sí, el otoño se avecina «caliente». La primera concentración: el día 7.
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