Granada

El Madrid sobrevive a Barac

El Real Madrid ganó en Vitoria después de más de cinco años sin hacerlo y reforzó su liderato en la ACB gracias a su buen pulso en los últimos minutos. Después de un partido jugado a ráfagas, con amplios parciales a favor de los dos equipos, que dominaban el choque y dejaban de hacerlo intermitentemente, los de Messina llegaban a la última recta en desventaja, y de repente presumieron de solidez

El base del Real Madrid Sergio Rodríguez (c) intenta superar la defensa del ala pívot estadounidense Marcus Haislip (detrás) y del pívot croata Stanko Barac, ambos del Caja Laboral,
El base del Real Madrid Sergio Rodríguez (c) intenta superar la defensa del ala pívot estadounidense Marcus Haislip (detrás) y del pívot croata Stanko Barac, ambos del Caja Laboral,larazon

El Caja Laboral se mató a sí mismo con un bote en el pie de Marcelinho Huertas y algunos fallos en los tiros libres, que permitieron al Real Madrid ganar un poco de esa confianza que les falta al menos una vez por semana. La derrota en Alemania en Euroliga había vuelto a llevar a los blancos a la casilla de salida y las sensaciones que desprendieron durante mucho tiempo en el Buesa Arena no fueron alentadoras. La suerte para los madrileños es que el Baskonia se mostró tan inseguro como ellos y las carencias de ambos se anularon para mantener el debate igualado hasta muy tarde.

El partido entre dos de los tres «gallitos» de la ACB demostró que no hay un dominador claro, un conjunto sólido con la mandíbula de granito e implacable en ataque. Real Madrid y Caja Laboral se repartieron las rachas, tanto las buenas como las malas, en una demostración de que tienen mucho trabajo por delante para ser perfectos.

Los blancos golpearon primero (17-22, min 10), para después dimitir durante el segundo periodo, con un 13-0 de parcial y seis minutos sin encontrar el aro enemigo (38-31, min 20). En otros tiempos, los vitorianos hubieran sentenciado ahí mismo, pero devolvieron el favor después. La exhibición de Barac, imparable para cualquier pívot que tuviera enfrente, estuvo a punto de acabar con el Madrid, mientras que Felipe Reyes, otra vez descomunal, fue el que mantuvo a los suyos cuando no encontraban otra vía hacia la canasta. Hasta en los mejores hubo igualdad en Vitoria y sólo decidió la claridad del Madrid cerca de la bocina.

q 12ª jornada: Granada, 68-L. Aro, 75 y Cajasol, 52-Manresa, 48.