Los Ángeles

Clooney novio a la fuga

Los planes de boda de Elisabetta Canalis han vuelto a asustar al actor

Renée Zellweger podría regresar a los brazos del actor ahora que ella ha roto con Bradley Cooper
Renée Zellweger podría regresar a los brazos del actor ahora que ella ha roto con Bradley Cooperlarazon

Tiene el aspecto y las maneras de un príncipe de cuento, pero cuando se acerca la hora de comer perdices, George Clooney sale volando. Parece que, en las cuestiones del corazón, su fuerte no son los finales felices y sólo escuchar la palabra «matrimonio» le provoca urticaria. El actor acaba de terminar su relación con la presentadora italiana Elisabetta Canalis tras haber discutido con ella en su casa del lago Como. Al parecer, Canalis perdió los nervios y salió dando un portazo poco después de compartir con Clooney una romántica cena en su restaurante favorito. Amigos del protagonista de «Ocean's eleven» aseguran que se sintió presionado porque su novia ya empezaba a pensar en planes de boda. De hecho, hace apenas dos semanas, Canalis, de 32 años, concedió una entrevista en la que aseguraba ser una «firme creyente en el matrimonio»; tanto es así que añadió muy segura: «En el futuro estaré casada».


En busca de una salida
Pero Clooney encontró la excusa perfecta para abandonarla cuando la presentadora dejó salir a flote su temperamento y se marchó a Milán con sus amigos. Lo cierto es que en los últimos tiempos ella ha hecho planes por separado. Mientras el actor seguía en Londres rodando su última película –«Los idus de marzo»–, Elisabetta se divertía en México de vacaciones o paseando por la alfombra roja de Cannes. Si bien la ruptura de Clooney con Canalis no parece sorprender a los más cercanos, ella intenta rearmar su corazón herido recurriendo a una popular técnica de sanación: irse de compras. Nada mejor que una tarde de «shopping» para solventar los problemas sentimentales. Mientras, Clooney sigue trabajando en Londres ajeno a los comentarios. Sus íntimos le defienden y aseguran que ya estaba harto de su relación con la italiana: «Ha tratado de buscar una salida a este noviazgo desde hace tiempo, y, seamos honestos, esto siempre acaba pasando».

Tras dos años de noviazgo, Elisabetta Canalis pasa a engrosar la interminable lista de mujeres que se han relacionado con George Clooney, de 50 años. De todas, sólo dos han conseguido hacer historia: Talia Balsam y Lisa Snowdon. La primera, actriz e hija de Martin Balsam, fue la única que logró que el protagonista de «Up in the air» pasase por el altar. Eso sí, antes de que acabase 1993, el divorcio ya había puesto punto y final a su idilio. La intérprete, que ha rehecho su vida con el actor de «Mad Men» John Salttery, es ahora una de sus mejores amigas. Y si Talia consiguió que George pronunciase el anhelado «sí quiero», la modelo y presentadora británica Lisa Snowdon ostenta otro título: el del noviazgo más longevo. Un lustro para una relación no es mucho tiempo, pero si se tiene en cuenta que con Clooney casi ninguna mujer pasa la barrera de los dos años, la cifra es meritoria. Tampoco se puede reprochar al actor que mantenga una actitud hipócrita. Él mismo reconoció públicamente que lo suyo no es el amor eterno. Después de divorciarse, juró que nunca más volvería a casarse y, hasta ahora, ha hecho todo lo posible para no volver a pronunciar aquello de «hasta que la muerte nos separe».

Parece que la que tiene todas las papeletas para regresar a los brazos de Clooney es su íntima amiga Renée Zellweger, con la que salió en 2001, después de que ella diese por roto su compromiso matrimonial con Jim Carrey. Ambos vuelven a compartir soltería, ya que Zellweger acaba de terminar su noviazgo con Bradley Cooper.


Una infinita lista de ex
- Sarah Larson es una camarera de Las Vegas que salió con Clooney durante un año y aprovechó su inesperada fama para convertirse en modelo.
- Antes, el actor estuvo con Krista Allen durante dos años. A ella la conoció rodando la película «Confesión de una mente peligrosa».
- En 1996, en París, Clooney sedujo a Celin Balitran, también camarera y estudiante de leyes, que lo dejó todo para irse con el actor a vivir a California.