Fichajes
Laporta telarañas en la caja
El Barcelona se ve obligado a pedir un crédito de 150 millones de euros para poder pagar a la plantilla
BARCELONA- No lleva ni una semana como presidente y a Sandro Rosell ya le están saliendo canas de los disgustos que está sufriendo. Primero fue la indemnización del ex director general, más de 850.000 euros, y ahora ha sido la tesorería. La última conferencia de prensa del mandato de Laporta corrió a cargo del economista Xavier Sala i Martín, que anunció «los mejores números de la historia» del Barça. La nueva junta sospecha que no es así.El vicepresidente económico, Xavier Faus, está acabando de negociar un crédito sindicado de 150 millones de euros con varias entidades bancarias que espera cerrar esta misma semana para hacer frente a las obligaciones inmediatas de tesorería. «Nos hemos encontrado un club endeudado y con problemas de tesorería», desvelaba Sandro Rosell en «Rac1». De momento, los jugadores no han cobrado las nóminas de junio, aunque el presidente lanzó un mensaje de tranquilidad, asegurando que la situación está en vías de solucionarse.Tal y como prometió durante la campaña, Rosell ha iniciado una serie de auditorías en el club para conocer la situación real en todas las áreas y sospecha que el panorama económico no es tan maravilloso como pintaba la junta saliente. Los problemas económicos son los que han obligado al Barça a vender a Chygrynskiy, a pesar de las reticencias de Pep Guardiola, gran valedor del ucranio. «El traspaso se encamarca dentro de las necesidades de tesorería del club», decía el club al anunciar la venta de «Chygro», que se vuelve al Shakhtar Donetsk a cambio de 15 millones de euros, después de costar 25 hace un año.Durante sus primeros días de mandato, Rosell ya ha iniciado contactos para cumplir otra de sus promesas, la de racionalizar los horarios de los partidos en el Camp Nou. De momento, el Gamper y la Supercopa se jugarán antes de las nueve.Por otra parte, ayer se confirmó a Alberto Puig como nuevo secretario técnico del fútbol base del Barça. Él será el encargado de promover a los futuros talentos de La Masia. Puig estará justo por debajo de Guillermo Amor, director técnico del fútbol formativo.
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